Sony retira la protección anticopia de sus discos
Copiar o no copiar la música de los compactos, ésa es la cuestión. Uno de los caballos de batalla en el negocio de la música durante los últimos meses ha sido el uso por parte de las discográficas de sistemas anticopia en sus CD. Las grandes de la música han incluido desde hace un par de años en algunos de su álbumes sistemas DRM que impiden hacer grabaciones de los discos.
La decisión ha animado lentamente las protestas de consumidores por todo el mundo que se han quejado de que no pueden escuchar los discos en sus reproductores o de que no pueden hacer copias domésticas.
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Copiar o no copiar la música de los compactos, ésa es la cuestión. Uno de los caballos de batalla en el negocio de la música durante los últimos meses ha sido el uso por parte de las discográficas de sistemas anticopia en sus CD. Las grandes de la música han incluido desde hace un par de años en algunos de su álbumes sistemas DRM que impiden hacer grabaciones de los discos.
La decisión ha animado lentamente las protestas de consumidores por todo el mundo que se han quejado de que no pueden escuchar los discos en sus reproductores o de que no pueden hacer copias domésticas.
Ante el clima enrarecido, Sony Music ha sido la primera en dar un paso atrás, y a partir de noviembre sus nuevos discos carecerán del CCCD (Control Copy CD), un sistema de DRM para evitar la copia.
Sony retira el sistema anticopia por las crecientes protestas de los consumidores, según reconoció la empresa. Otro sello japonés, Avex, seguirá sus pasos.
Tanto EMI como Warner, BMG o la misma Sony han tenido que encarar en Francia denuncias de la organización de consumidores UFC que les acusaba de vender CD defectuosos. En septiembre de 2003 EMI fue condenada a devolver el dinero de un CD a un aficionado que denunció que el producto era defectuoso.
El mismo argumento ha esgrimido este verano la UFC contra la FNAC, a quien acusa de vender productos defectuosos, ya que no cumplen con el estándar de los CD (el llamado Libro Rojo) al no permitir que los discos se puedan reproducir.
Estas decisiones han animado a la asociación española FACUA a presentar una denuncia, que efectuará en las próxima semanas, contra varias discográficas. Según sus responsables, la argumentación jurídica se basará en los mismos puntos: los CD que se venden con protecciones anticopia son defectuosos porque no cumplen con el estándar y no se pueden escuchar en cualquier reproductor. "Los discos con sistemas anticopia nos dan bastantes problemas", reconoce un vendedor de la FNAC en Madrid; "cuando los clientes reclaman se les devuelve el dinero. Encima que la gente viene a comprar discos les penalizan con esto, estoy harto de ver discos con el copycontrol que después están en la manta".
La polémica llega a España a la vez que la reforma del Código Penal añade una nebulosa al derecho o no de la copia privada.