Se entrega un conductor que causó un choque en el que murieron dos personas

Un joven de 23 años se entregó ayer a la Guardia Urbana de Barcelona, 12 horas después de haber huido de un accidente en el que se vio implicado y en el que fallecieron dos personas y una niña de 13 años resultó herida. El accidente se produjo a la una de la madrugada de ayer en la confluencia de las calles de Bòvila y Mare de Déu del Remei, en el barrio de Poble Sec, cuando un Audi A-4 conducido por Josep R. A., que circulaba con exceso de velocidad, chocó contra un Opel Astra que salía del cruce. Dos de los ocupantes de este último vehículo, Miquel O. P., de 44 años, e Issis G. H., de 33, fa...

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Un joven de 23 años se entregó ayer a la Guardia Urbana de Barcelona, 12 horas después de haber huido de un accidente en el que se vio implicado y en el que fallecieron dos personas y una niña de 13 años resultó herida. El accidente se produjo a la una de la madrugada de ayer en la confluencia de las calles de Bòvila y Mare de Déu del Remei, en el barrio de Poble Sec, cuando un Audi A-4 conducido por Josep R. A., que circulaba con exceso de velocidad, chocó contra un Opel Astra que salía del cruce. Dos de los ocupantes de este último vehículo, Miquel O. P., de 44 años, e Issis G. H., de 33, fallecieron, mientras que la menor que iba con ellos resultó herida.

Después del accidente, los dos ocupantes del Audi emprendieron la huida a pie, por lo que inicialmente la policía sospechó que el coche pudiera haber sido robado. Una investigación sobre la propiedad del vehículo comprobó que no había sido sustraído, y cuando los agentes buscaban al titular del coche, el conductor se presentó acompañado por un abogado en la comisaría de atestados de la Guardia Urbana en la Zona Franca. Tras declarar, el joven fue puesto en libertad con cargos por denegación del deber de socorro. También se personó ante la Guardia Urbana Jorge Jonathan T. P., de 19 años, que acompañaba a Josep R.A., y que declaró como testigo.

La Guardia Urbana, que continúa sus investigaciones sobre este caso, tomó declaración y posteriormente dejó en libertad con cargos al joven, que se autoinculpó de la colisión ocurrida. La Guardia Urbana explicó que Josep R. A. admitió que conducía el vehículo que chocó con el coche en el que viajaban las dos personas fallecidas y la niña herida. Ésta se recuperaba ayer de las heridas sufridas en el Hospital Clínico de Barcelona. El joven negó que condujera bajo los efectos del alcohol o de drogas y aseguró que fue el pánico lo que le hizo alejarse del lugar del accidente.

Si aparecieran testigos que hubieran visto a Josep R. A. tomando alcohol antes del accidente, ello podría incluirse en el atestado que ha sido remitido al juez.

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