Crítica:CINE

Piruetas con mensaje

Segunda realización de un conocido operador, Peter Pau, hecha a mayor gloria del entonces reciente éxito de Michelle Yeoh en Tigre y dragón (la actriz chino-malaya se reserva aquí numerosos cometidos: productora, coautora del argumento y protagonista absoluta). El secreto del talismán es un curioso artefacto, a medias entre el puro entretenimiento y el sutil subrayado ideológico. Una historia llena de inverosímiles piruetas, no en vano algunos de sus personajes son acróbatas circenses, por la que campa un malvado de opereta y en la que se persigue una ancestral reliquia religiosa...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Segunda realización de un conocido operador, Peter Pau, hecha a mayor gloria del entonces reciente éxito de Michelle Yeoh en Tigre y dragón (la actriz chino-malaya se reserva aquí numerosos cometidos: productora, coautora del argumento y protagonista absoluta). El secreto del talismán es un curioso artefacto, a medias entre el puro entretenimiento y el sutil subrayado ideológico. Una historia llena de inverosímiles piruetas, no en vano algunos de sus personajes son acróbatas circenses, por la que campa un malvado de opereta y en la que se persigue una ancestral reliquia religiosa, apta para todos los públicos, y poco más.

Esta película quedará no obstante en los anales por elevarse más allá de su mero contenido de acción sin más, hasta convertir su mensaje en un curioso llamado a la concordia religiosa, con el tema del Tíbet como telón de fondo. Ahí es nada que una película china como El secreto del talismán, y protagonizada por chinos, concluya con una clausura del relato en la que sus personajes restituyen a una comunidad de monjes tibetanos la tan buscada reliquia... un mensaje simbólico cuyo calado político es de suponer que no pasará inadvertido ni dentro ni fuera de las fronteras.

EL SECRETO DEL TALISMÁN

Director: Peter Pau. Intérpretes: Michelle Yeoh, Ben Chaplin, Richard Roxburgh, Brandon Chang, Darie Cook. Género: aventuras. China-Hong Kong-Taiwan, 2002. Duración: 103 minutos.

Archivado En