Aparcamiento para superhéroes

Aunque no tengan ese propósito, los centros comerciales pueden convertirse en museos temporales de la cultura popular. En Alcalá de Guadaíra (Sevilla) hay un ejemplo: el centro Los Alcores acoge hasta el 22 de agosto seis reproducciones de coches aparecidos en películas y series de televisión como Robocop, Batman, Mr. Bean, Harry Potter o Los Picapiedra.

Francisco Parra, director del centro comercial, afirma que "la aceptación está siendo muy buena, sobre todo entre los más pequeños". Desde luego, los niños se encuentran entre los que más abren los ojos cuando descubren lo...

Aunque no tengan ese propósito, los centros comerciales pueden convertirse en museos temporales de la cultura popular. En Alcalá de Guadaíra (Sevilla) hay un ejemplo: el centro Los Alcores acoge hasta el 22 de agosto seis reproducciones de coches aparecidos en películas y series de televisión como Robocop, Batman, Mr. Bean, Harry Potter o Los Picapiedra.

Francisco Parra, director del centro comercial, afirma que "la aceptación está siendo muy buena, sobre todo entre los más pequeños". Desde luego, los niños se encuentran entre los que más abren los ojos cuando descubren los estrafalarios diseños de estos vehículos. Así pasa cuando se topan con el Ford Anglia volador y color turquesa de Harry Potter. Se acercan, lo tocan y se asoman a su interior, como buscando a los aprendices de mago protagonistas de la película.

Pero son los no tan niños quienes tienen las caras de admiración más sinceras. Iñaki Sales es un veinteañero que está extasiado delante del Ford Taurus de Robocop, "mitad hombre, mitad máquina, todo policía" como anunciaba el eslogan de la película de Paul Verhoeven de 1987. "Estoy impactado. Completamente flipado", reconoce con la mirada perdida en la tosca carrocería negra del futurista coche celular. "Cuando lo he tocado y he visto que era de verdad no me lo podía creer", se asombra Iñaki

El papel de Robocop se le ha asignado esta vez a un maniquí (todo plástico) sentado al volante. Tiene la barbilla clavada en su pecho de metal. "No está muy bien conseguido, parece que duerma", dice Iñaki. Lo cierto es que, por el oscuro color del chasis de su cuerpo, Robocop, más que soñar, aparenta estar a punto de ir al desguace.

Batman y Mr Bean

Al Ford del policía con armadura le acompaña un icono de la cultra pop: el Batmóvil. Olvídese del supersofisticado vehículo que corre y vuela en las modernas películas del hombre murciélago. Lo que encontrará en Alacalá es un genuino Lincoln Continental negro de 1957, con motor de 8 cilindros y dispositivo eyector en los asientos del conductor y el acompañante. El joven Nicolás Doblado, que mira con curiosidad el interior de escai rojo del Batmóvil, ya lo ha reconocido. "Es el de la serie aquella en la que aparecían los boom y los crash, en letras de tebeo, ¿no?". Nicolás se refiere a la serie producida por la cadena americana ABC entre 1966 y 1969 y protagonizada por Adam West.

La muestra alberga también autos pertenecientes a otra clase de superhéroes. Es el caso de Mr Bean, el simpático y retorcido personaje creado por el actor británico Rowand Atkinson, que se mueve por Londres conduciendo un llamativo Mini color pistacho. El mismo que se usaron en el rodaje de las escenas de exteriores se encuentra en Los Alcores.

En la exposición también hay espacio para los dibujos animados. ¿Recuerdan los coches que aparecían en Los Picapiedra, aquellos de los que asomaban los pies de sus conductores para ponerlos en movimiento? Aquí encontramos la versión eléctrica del coche de tracción humana que usaba Pedro Picapiedra. Se trata de un cochecito de golf de apariencia prehistórica con el que se desplazaba por los estudios de rodaje Brian Levant, el director de la versión cinematográfica de 1994.

Los que acudan a este centro comercial sevillano, entre compra y compra pueden acercarse a uno de estos coches de fantasía, curiosear y quizás dejar volar algo su imaginación.