Mérida estrena una 'Medea' metafórica e inmigrante

Medea es la obra que más veces se ha representado en el Festival de Teatro Clásico de Mérida, desde que éste se inaugurara en 1933 con una versión de Unamuno del texto griego. Anoche, por decimoséptima vez, el mito volvió al escenario del anfiteatro romano emeritense con Medea la extranjera. Una versión de Carlos Iniesta con la que el director Ricardo Iniesta y su grupo Atalaya denuncian el desprecio con el que sociedades del norte del planeta tratan a las del sur y las terribles consecuencias que de ello se pueden derivar.

La Medea de Iniesta, que ha sido coproduci...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Medea es la obra que más veces se ha representado en el Festival de Teatro Clásico de Mérida, desde que éste se inaugurara en 1933 con una versión de Unamuno del texto griego. Anoche, por decimoséptima vez, el mito volvió al escenario del anfiteatro romano emeritense con Medea la extranjera. Una versión de Carlos Iniesta con la que el director Ricardo Iniesta y su grupo Atalaya denuncian el desprecio con el que sociedades del norte del planeta tratan a las del sur y las terribles consecuencias que de ello se pueden derivar.

La Medea de Iniesta, que ha sido coproducida con el festival, habla de los emigrantes y los problemas con que se encuentran en su huida hacia lo que ellos creen es un mundo mejor.

Como si se tratara de una de las miles de historias que diariamente se conocen, y de manera especial en España donde llegan miles de emigrantes cada año, esta Medea encuentra en su huida miseria, ostracismo, desprecio y barbarie. Es la metáfora que el director emplea para denunciar la xenofobia y la dejación que hay en nuestra sociedad con respecto al extranjero: "El mito de Medea es el más actual y el más vigente", dice Iniesta, "hoy son millones de personas las que se quedan seducidas con el glamour de los países como el nuestro o como Estados Unidos, pero cuando vienen les recibimos con desprecio", y añade, "ello conlleva que a veces haya extranjeros que reaccionan con el salvajismo, la violencia y la barbarie con que lo hace Medea, que mata a sus propios hijos, a Creusa, a Creonte...".

Iniesta quiere que el espectador que vea Medea, la extranjera pueda entender que sociedades como la nuestra tienen una parte de responsabilidad en hechos terribles como el 11-S y el 11-M: "No hay que olvidar que primero les vendemos Eldorado a esos pueblos, al tiempo que fomentamos el desprecio hacia ellos y sus costumbres".

En este montaje aparecen cuatro Medeas representando cada una de ellas al fuego, el viento, la tierra y el agua: "Es algo que me inspiro el ver las Medeas cinematográficas de Pasolini y una poco conocida de Lars von Trier", dice el director que sitúa cada una de estas mujeres en las diferentes etapas de la vida humana de este mito.

Esta versión recurre a autores que han abordado este mito como Grillparzer, Pasolini, Apolonio de Rodas, Séneca, Eurípides y sobre todo los textos que Heiner Müller escribió sobre Medea.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En