Eurocopa 2004 | Nuevo fracaso de la selección española

"No es momento de decir si sigo"

Iñaki Sáez culpa de la derrota a la falta de gol y no desvela si dimite, mientras Villar recuerda que ya le renovó el contrato

"No es el momento de hacer esta pregunta, pero ¿va a usted a seguir de seleccionador?", le preguntó a Iñaki Sáez un periodista extranjero. A lo que éste, con el rostro muy tenso, respondió: "Efectivamente, no es el momento de decirlo y no lo voy a decir". Se abre así un gran interrogante sobre la continuidad en el cargo del seleccionador español a pesar de que, poco antes de la Eurocopa, ampliara su contrato hasta 2006, es decir, hasta después del Mundial de Alemania.

El presidente de la federación, Ángel Villar, había terciado antes pretendiendo zanjar un debate ya abierto, afirmando q...

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"No es el momento de hacer esta pregunta, pero ¿va a usted a seguir de seleccionador?", le preguntó a Iñaki Sáez un periodista extranjero. A lo que éste, con el rostro muy tenso, respondió: "Efectivamente, no es el momento de decirlo y no lo voy a decir". Se abre así un gran interrogante sobre la continuidad en el cargo del seleccionador español a pesar de que, poco antes de la Eurocopa, ampliara su contrato hasta 2006, es decir, hasta después del Mundial de Alemania.

El presidente de la federación, Ángel Villar, había terciado antes pretendiendo zanjar un debate ya abierto, afirmando que Sáez seguiría en el cargo. "Ya le habíamos renovado, sigue evidentemente en el cargo", dijo lacónicamente.Y a partir de ahí pasó al discurso diplomático de las felicitaciones obligado: "Quiero felicitar a las selecciones de Portugal y Grecia y agradecer a toda la gente que nos ha arropado en estos partidos. No les pudimos dar la alegría de estar en los cuartos de final. Ahora, a pensar en el próximo Mundial, cuya fase de clasificación empieza en mes y medio", afirmó Villar.

"Nos han marcado dos tantos, y eso no es ni mucho ni poco", dice el seleccionador
"Ahora, a pensar en el próximo Mundial", propone el presidente de la federación
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Sin embargo, después del sonado fracaso de ayer parece difícil que Sáez cumpla el compromiso firmado. Su posición de debilidad es extrema. Y también la de la federación, muy cuestionada en los últimos meses. Y con Gerardo González llamando a la puerta para sustituir al presidente actual, Ángel María Villar.

Tardó mucho Sáez en comparecer ante los medios de comunicación. Y cuando lo hizo, traía el semblante desencajado. Para alguien acostumbrado a recoger los éxitos de las categorías inferiores de la selección, debió ser anoche el momento más duro de su carrera de entrenador. No tenía ganas de hablar y se le notaba. Quería huir de allí como fuera, a pesar de que la prensa no hizo sangre en las preguntas. ¿Cuál la clave de la descalificación? "La falta de gol", respondió Sáez, de 61 años. "Nos ha faltado gol. Lo demás, juego, carácter y equipo, bien". Ése fue el resumen del seleccionador sobre el pobre campeonato del conjunto español.

En efecto, España sólo ha marcado dos tantos en tres partidos: el de Valerón en el primer encuentro ante Rusia y el de Morientes frente a Grecia. Eso fue todo. Una birria de producción ofensiva para un cuadro que acabó jugando el torneo con todos sus delanteros en el campo: Raúl, Torres, Luque y Morientes. Claro que el mejor goleador español del pasado curso, el valencianista Mista, se había quedado en casa: no fue convocado por el seleccionador. Sáez insistió en que el único fallo de su combinado había sido la escasez goleadora. Y de ahí no se movió. Pero, ¿acaso no mostró también debilidad defensiva durante gran parte del torneo? "Nos han hecho dos goles y eso no es ni mucho ni poco", replicó el entrenador vasco.

Respecto al choque de ayer, Sáez dijo que había recurrido a la fórmula" del contragolpe para pillar a la contra a los portugueses, que saldrían en tromba, como sucedió. Por eso jugó Fernando Torres en lugar de Morientes, explicó Sáez. Para aprovechar su velocidad y su lucha con los centrales. Y cuando marcó Nuno Gomes, España cambió la táctica. Se fue al ataque. Pero sin resultado en ambos casos. Por último, Sáez quiso ser caballeroso y felicitó a su adversario. "Portugal ha hecho lo que debía. Ya he felicitado a mi amigo Scolari".

Iñaki Sáez y Cañizares se dirigen desde el banquillo a los jugadores.ULY MARTÍN

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