Reportaje:Eurocopa 2004 | Segunda jornada del Grupo A

"Estamos en la buena línea"

Iñaki Sáez lamenta que la selección encajara el gol cuando tenía el partido más controlado

"Estoy muerto de cansancio", dijo Albelda, al que se le notaba la tensión en el rostro tras el encuentro. "Si se meten 10 atrás, lo único que puedes hacer es abrir el balón a las bandas y desbordar. Y eso lo hemos hecho, tanto por la izquierda como por la derecha", explicó el centrocampista del Valencia, que se quejó de que el estado del terreno de juego, muy seco, no favoreció el fútbol de desborde de Vicente y Joaquín. El bético sustituyó en la segunda parte a Exeberria, que se retiró con molestias musculares: un bocadillo en el gemelo. ¿Falló España? "No, nosotros no hemos fallado. La que f...

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"Estoy muerto de cansancio", dijo Albelda, al que se le notaba la tensión en el rostro tras el encuentro. "Si se meten 10 atrás, lo único que puedes hacer es abrir el balón a las bandas y desbordar. Y eso lo hemos hecho, tanto por la izquierda como por la derecha", explicó el centrocampista del Valencia, que se quejó de que el estado del terreno de juego, muy seco, no favoreció el fútbol de desborde de Vicente y Joaquín. El bético sustituyó en la segunda parte a Exeberria, que se retiró con molestias musculares: un bocadillo en el gemelo. ¿Falló España? "No, nosotros no hemos fallado. La que falló fue Portugal perdiendo ante Grecia. De no haber sido así, ahora estaríamos los portugueses y nosotros prácticamente clasificados", remató Albelda antes de recordar que el conjunto heleno sólo lanzó un córner en toda la segunda parte.

"Nosotros no hemos fallado; la que falló fue Portugal perdiendo ante Grecia", dice Albelda
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El calor, el estado seco del terreno de juego, la falta de contundencia atrás, el desperdicio de las oportunidades... Todos fueron factores que fueron destilando los jugadores españoles para explicar su empate de ayer ante los griegos. Y el seleccionador, Iñaki Sáez, con su habitual gorra calada hasta los ojos, compareció muy serio en la conferencia de prensa. "Paradójicamente cuando el partido estaba más controlado, llegó el gol inesperado. El equipo está en la buena línea", afirmó el entrenador español, que se enojó cuando le preguntaron si había engañado a la afición al anunciar que haría cambios de un partido a otro. "Cuando en Las Rozas

[lugar de concentración de la selección antes de viajar a Portugal], dije que iba a hacer cambios, lo pensaba en esos momentos. Confiaba en la buena fe de vosotros. Y ahora me sale en contra. Me equivoqué", indicó Sáez, que a continuación explicó la sustitución de Raúl por Fernando Torres a un cuarto de hora del final. "Aunque ellos estaban metidos muy atrás, busqué la velocidad y la disputa de Torres". ¿La oportunidad que desaprovechó Raúl fue la clave del partido [en alusión a un remate de cabeza aparentemente fácil errado por el delantero del Madrid tras un centro de Joaquín]? "No, una oportunidad fallada no tiene porqué ser la determinante. Ha habido varias", respondió Sáez, que dio algunos nombres de selecciones que le habían gustado hasta el momento: "Dinamarca, Suecia, me gustó el Alemania-Holanda, y también la primera parte de Grecia ante Portugal".

Precisamente Raúl estaba sentado junto al entrenador. El capitán español se presentó en la sala de prensa sin ducharse, con chanclas y calcetines blancos. Se repantigó en la silla. Venía a recoger un premio, una especie de Copa alargada, que le había otorgado la UEFA como mejor jugador del partido. ¿Sorprendido por el premio?, le preguntaron en inglés. Y cuando le tradujeron la pregunta, Raúl dudó, enarcó las cejas y dijo: "Sí, un poco sí", lo que originó algunas risas entre los periodistas. "Creo que hemos hecho un buen partido. Hemos sido muy superiores. Va a ser muy difícil que un equipo pueda ganarnos. El griego es un conjunto muy fuerte en el aspecto físico", remachó Raúl.

Ya en la zona mixta, por donde salen los jugadores para subir al autobús que los desplaza al hotel, algunos se pararon para atender a la prensa. Allí estaba Xavi, el centrocampista del Barcelona, lamentándose del empate final. "Estaba calentando en la banda, creyendo que si marcábamos el 2-0 iba a jugar un ratito, cuando, de pronto, llega su gol. Ha sido muy inesperado", dijo el fino volante azulgrana, muy satisfecho con su temporada en el Barça: "Este año he jugado con mucha comodidad en mi equipo. Mejor que nunca".

En cuanto a Grecia, el delantero Nikolaidis no podía ocultar su satisfacción. Se le escapaba una amplia sonrisa mientras trataba de entender las preguntas que le hacían en español, que sólo chapurrea a pesar de llevar más de un año en España. "Para mí ha sido una alegría que no jugaran desde el principio Valerón y Torres. Son muy buenos", soltó el delantero del Atlético, que añadió: "Este empate es más importante para nosotros que la victoria ante Portugal, porque España es mucho más fuerte que los portugueses. Para mí es favorita para el título". Claro que ahora Grecia, que no había ganado ni un solo encuentro en una fase final hasta llegar a Portugal, tiene la clasificación muy cerca. Y así lo sabe su entrenador, el alemán Otto Rehhagel, que quiso frenar la euforia: "Vamos a saborear un poco el resultado y a descansar. Sobre todo a descansar", insistió.

Iñaki Sáez (izquierda) y Rehhagel (derecha) dan órdenes a sus jugadores.ASSOCIATED PRESS / REUTERS

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