El montón de contraseñas

DIRECTA CONSECUENCIA del creciente número de sitios de pago, cada vez más los internautas tenemos que identificarnos y recordar una contraseña antes de acceder al contenido de una página. Una pesadilla de la cual se puede salir por lo menos de tres maneras distintas.

Creer que una sola contraseña sirve para todo es una ilusión. No es conveniente porque quien la consiguiera tendría acceso a todo lo nuestro. Es imposible en la medida en la que algunos sitios nos identifican por una dirección de correo electrónico, otros por un apodo, y porque los parámetros de las contraseñas varían.
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DIRECTA CONSECUENCIA del creciente número de sitios de pago, cada vez más los internautas tenemos que identificarnos y recordar una contraseña antes de acceder al contenido de una página. Una pesadilla de la cual se puede salir por lo menos de tres maneras distintas.

Creer que una sola contraseña sirve para todo es una ilusión. No es conveniente porque quien la consiguiera tendría acceso a todo lo nuestro. Es imposible en la medida en la que algunos sitios nos identifican por una dirección de correo electrónico, otros por un apodo, y porque los parámetros de las contraseñas varían.

La solución más sencilla consiste en tener un documento Word con todos los sitios en los que uno se registra. El que creé hace años ya tiene más de 150 contraseñas para tener acceso a igual número de sitios. Un atajo en el menú de inicio me permite abrir inmediatamente este documento de más de 20 páginas en el cual encuentro muy pronto lo que busco gracias a la función de búsqueda del programa (Ctl+F). Funciona y sale gratis.

Más segura y más cómoda es la solución de RoboForm. Este programa ligero (1,7 megas) registra y encripta identidades y contraseñas. La primera vez pregunta si se le quiere confiar los datos con los que uno se acaba de registrar en determinado sitio. Luego aparece automáticamente cada vez que uno regresa y un clic basta para que llene las casillas correspondientes. También llena los formularios. Puede generar contraseñas complicadísimas. La versión básica es gratuita.

Se puede instalar RoboForm en un minidisco USB de llavero, lo cual es muy útil para los trabajadores móviles. Cada vez que lo quieren usar con una computadora ajena, tienen que instalar el programa para poder acceder a las contraseñas que se quedan en el disco USB.

MetaPass acaba de lanzar un programa que funciona exclusivamente a partir de un minidisco USB (100 dólares). No aparece automáticamente cuando se llega al sitio deseado. Hace falta activar el icono MetaPass de la barra de navegación del navegador para llegar directamente al contenido sin tener que identificarse.