Empresarios de Alicante, entre la comprensión y la reticencia

Los máximos responsables de la patronal alicantina, Antonio Fernández Valenzuela, presidente de la Cámara de Comercio, y Joaquín Rocamora, presidente de la Confederación de Empresarios de la Provincia de Alicante (Coepa), encajaron ayer con diferente tono la actuación del Consell y de las cajas de ahorros ante la suspensión de pagos de Terra Mítica.

Mientras Valenzuela habló de "falta de sensibilidad territorial", Rocamora dio por bueno el esfuerzo del Consell. El presidente del ente cameral alicantino, pese a sus intentos para no abrir brecha en las relaciones entre Alicante y Valencia...

Los máximos responsables de la patronal alicantina, Antonio Fernández Valenzuela, presidente de la Cámara de Comercio, y Joaquín Rocamora, presidente de la Confederación de Empresarios de la Provincia de Alicante (Coepa), encajaron ayer con diferente tono la actuación del Consell y de las cajas de ahorros ante la suspensión de pagos de Terra Mítica.

Mientras Valenzuela habló de "falta de sensibilidad territorial", Rocamora dio por bueno el esfuerzo del Consell. El presidente del ente cameral alicantino, pese a sus intentos para no abrir brecha en las relaciones entre Alicante y Valencia, afirmó "que los equilibrios territoriales no son sólo discursos" y resaltó que la suspensión de pagos "no es una buena noticia para nosotros". El dirigente de la Cámara reclamó alternativas a la actual situación "porque no todas las soluciones son de manual, y hay otras salidas".

El análisis de Valenzuela contrastó con el de Rocamora. El líder de la patronal alicantina intentó desdramatizar el expediente de suspensión de pagos que ha presentado Terra Mítica. "La suspensión de pagos tiene mala prensa, pero es un arma legal perfectamente legítima", precisó. "Tanto El Consell como las cajas de ahorro habrán hecho hasta donde creen que pueden llegar".

Pere Joan Devesa, responsable del sector que en primera instancia sentirá los efectos de la crisis del complejo de ocio Terra Mítica, los hoteleros de Benidorm, optó por la prudencia. Devesa confió en que las repercusiones en el sector turístico de la suspensión de pagos del parque temático "sean mínimas o nulas" y declinó comentar la actitud de los máximos accionistas, o sea las cajas y el Consell.