Mairena, Caracol y Terremoto abren la colección de discos flamencos de RTVE
RTVE ha abierto al público su muy estimable archivo flamenco y acaba de recuperar, remasterizadas en CD, las voces de tres cantaores gigantescos: la colección Nuestro flamenco se abre con dos discos y una quincena de cantes de Antonio Cruz García, Antonio Mairena (1909-1983); Manuel Ortega Juárez, Manolo Caracol (1909-1973), y Fernando Fernández Monje, Terremoto de Jerez (1934-1981).
El también histórico Perrate de Utrera y las guitarras de Melchor de Marchena, Enrique de Melchor, Manuel Morao y Diego de El Gastor completan este primer rescate, que irá recupe...
RTVE ha abierto al público su muy estimable archivo flamenco y acaba de recuperar, remasterizadas en CD, las voces de tres cantaores gigantescos: la colección Nuestro flamenco se abre con dos discos y una quincena de cantes de Antonio Cruz García, Antonio Mairena (1909-1983); Manuel Ortega Juárez, Manolo Caracol (1909-1973), y Fernando Fernández Monje, Terremoto de Jerez (1934-1981).
El también histórico Perrate de Utrera y las guitarras de Melchor de Marchena, Enrique de Melchor, Manuel Morao y Diego de El Gastor completan este primer rescate, que irá recuperando los mejores temas grabados en directo por la serie Rito y geografía del cante, que se emitió en la televisión pública entre 1971 y 1973.
El director de la colección, José María Velázquez-Gaztelu, fue el flamencólogo, coguionista, presentador y entrevistador de esta serie que, dirigida por Mario Gómez y coescrita por Pedro Turbica, realizó 100 programas de media hora, visitó 28 localidades, registró a 186 cantaores, 47 guitarristas, 13 grupos y 313 palmeros, bailaores, jaleadores y "gente de reunión".
Dada su ambición por recoger todos los flamencos posibles, desde el más comercial al más rupturista y marginal, la colección, que lanza 10.000 ejemplares de cada disco, irá combinando nombres clásicos desaparecidos con figuras de hoy como Manolo Sanlúcar, Paco de Lucía, Menese o Morente.
Los programas se grabaron en bares, colmaos, casas y otros escenarios íntimos, lo que, según Velázquez-Gaztelu, hizo desaparecer "el histrionismo de la representación" y permitió captar "la espontaneidad sin artificios, la invención y la improvisación más genuinas".
El primer volumen se abre con unos poderosos martinetes de Mairena, que canta también por soleá, malagueña, siguiriyas y romances junto a la guitarra de Manuel Morao. Luego, fandangos, soleares, bulerías y dos tandas de siguiriyas de Terremoto (ocho minutos cada una) y dos muestras del toque de Melchor de Marchena y su hijo Enrique. La segunda entrega se centra en Caracol y se completa con el gran solearero José Fernández Granados, Perrate de Utrera, el arte de su mítica familia y el toque de Diego de El Gastor.