La Administración supo hace año y medio del desamparo de cuatro niños de Málaga

Los servicios sociales del Ayuntamiento de Málaga y de la Junta tenían conocimiento desde hace año y medio de la situación de desamparo en la que se encontraban los cuatro niños de entre uno y ocho años cuyos padres fueron detenidos el pasado sábado por un presunto delito de abandono.

En octubre de 2002, el colegio Santa María de Gracia, en el que estaban matriculadas las dos niñas mayores, de ocho y seis años, informó al Ayuntamiento de que faltaban intermitentemente al colegio.

Desde entonces, los servicios sociales y el propio colegio advirtieron en varias ocasiones a los padr...

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Los servicios sociales del Ayuntamiento de Málaga y de la Junta tenían conocimiento desde hace año y medio de la situación de desamparo en la que se encontraban los cuatro niños de entre uno y ocho años cuyos padres fueron detenidos el pasado sábado por un presunto delito de abandono.

En octubre de 2002, el colegio Santa María de Gracia, en el que estaban matriculadas las dos niñas mayores, de ocho y seis años, informó al Ayuntamiento de que faltaban intermitentemente al colegio.

Desde entonces, los servicios sociales y el propio colegio advirtieron en varias ocasiones a los padres, que hicieron caso omiso. El director de los servicios sociales del Ayuntamiento, Manuel Jiménez, reconoció que la situación empeoró en el presente curso y que en enero se dio traslado del caso a la Fiscalía de Menores. Dijo también que los inspectores de su departamento no han conseguido en los últimos meses entrevistarse con los padres, porque no se encontraban nunca en la vivienda y no respondían las citaciones.

En todo este tiempo se han cruzado trámites burocráticos sin que se produjera ninguna medida efectiva, hasta que el pasado sábado la policía recogió a los menores en la calle. Vivían en condiciones higiénicas inaceptables, llevaban un día sin comer, y tuvieron que ser desparasitados. El padre ha ingresado en prisión acusado de abandono y malos tratos, y la madre quedó en libertad con cargos.

El presidente de Prodeni, José Luis Calvo, dijo ayer que este caso evidencia que el actual sistema de protección "no sirve".

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