PUGNA ENTRE DOS DIRIGENTES DEL PP

El Ayuntamiento aporta tres veces menos al Consorcio de Transportes que la Comunidad

La mitad del precio del billete de metro está subvencionada por las administraciones

El Consorcio de Transportes subvenciona la mitad del precio real de cada billete sencillo de autobús, metro y cercanías, mientras que el viajero sólo paga la otra mitad del precio real. De ese 50% subvencionado, la Comunidad de Madrid paga el 62,57%, mientras que el Ayuntamiento sólo sufraga el 17,17%. Es decir, la Comunidad corre con casi tres veces más gastos que el Consistorio por el mismo concepto. Pero es que además el Gobierno regional aporta este año tres veces más presupuesto al Consorcio de Transportes que el Ayuntamiento. Es decir, 539 millones de euros frente a 187 millones.

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El Consorcio de Transportes subvenciona la mitad del precio real de cada billete sencillo de autobús, metro y cercanías, mientras que el viajero sólo paga la otra mitad del precio real. De ese 50% subvencionado, la Comunidad de Madrid paga el 62,57%, mientras que el Ayuntamiento sólo sufraga el 17,17%. Es decir, la Comunidad corre con casi tres veces más gastos que el Consistorio por el mismo concepto. Pero es que además el Gobierno regional aporta este año tres veces más presupuesto al Consorcio de Transportes que el Ayuntamiento. Es decir, 539 millones de euros frente a 187 millones.

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La Comunidad aporta tres veces más dinero a las arcas del Consorcio Regional de Transportes que el Ayuntamiento de Madrid, tanto en subvenciones directas al precio real del billete sencillo como al presupuesto de este organismo. Aunque el Ayuntamiento de Madrid es el titular del 75% de las acciones de la empresa del suburbano, la Comunidad paga tres veces más por mantener el precio público de los billetes y para garantizar así el funcionamiento del Consorcio.

En este sentido, el mensaje del equipo municipal sobre que la posible retirada del Ayuntamiento del Consorcio de Transportes no afectará ni a la tarifa ni al servicio de los transportes públicos de la capital no parece muy exacta, dada la compleja composición del organismo.

Independencia jurídica

Esta entidad tiene una naturaleza jurídica de organismo autónomo mercantil, y su presupuesto depende de las aportaciones tanto de la Comunidad de Madrid como del Ayuntamiento, así como de la Administración central.

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Es decir, aunque las diferentes empresas de transporte de la Comunidad -como la Empresa Municipal de Transportes (EMT), Metro, Renfe y las diferentes empresas de autobuses interurbanos- mantienen su independencia jurídica, el precio de los billetes y abonos de transporte es fijado según un marco común, y es de esta misma forma como se compensa la diferencia entre el precio real del billete y el precio que el usuario abona.

Si un billete sencillo para viajar en metro o en un autobús de la EMT cuesta 1,15 euros, el usuario sólo está pagando la mitad del precio real del billete, que es de 2,30 euros. El resto del coste lo abonan las diferentes administraciones que forman el Consorcio de Transportes: de los 1,15 euros restantes que no abona el viajero, la Comunidad de Madrid paga el 62,57%; el Estado, el 20,25%, y el Ayuntamiento, el 17,17%. Estas subvenciones se extienden a los billetes de 10 viajes y a los abonos mensuales y anuales.

La diferencia del gasto en subvenciones entre las administraciones adquiere su dimensión real si se tiene en cuenta la cantidad de billetes vendidos cada año: según datos del Consorcio, en 2002 se vendieron más de 1.500 millones. Así, con la retirada del Ayuntamiento del Consorcio, las tarifas sufrirían la pérdida del 17,17% de la parte subvencionada por el Consistorio, porcentaje que, aunque no es tan importante como la aportación de la Comunidad, e incluso de la Administración central, debería ser compensada por estas dos administraciones si no se pretenden cargar sobre el viajero, como prometió ayer el equipo municipal. Además, la marcha del Consistorio supondría un problema añadido de costes y de coordinación entre las diferentes empresas de transporte de la Comunidad, coordinación para la que fue creado el Consorcio de Transportes en 1985.

La posición central de Madrid en la Comunidad, tanto por su geografía como por la infraestructura de transportes, supondría que tendría que crearse un tipo de abono de transportes específico para viajar desde un municipio en la periferia hasta la capital y otro diferente, y posiblemente con una tarifa también distinta, para proseguir el viaje desde el intercambiador hasta el punto final de destino en Madrid.

Aportación al presupuesto

Con la retirada del Ayuntamiento, el Consorcio perdería una de las entidades fundamentales que lo componen y que son las que aportan los fondos para su presupuesto, que este año es de 880 millones de euros, de los que el Consistorio aporta más de 187 millones, frente a los 154 millones del Estado y los 539 millones de euros de la Comunidad.

La aportación de la Administración regional está incluida en el proyecto de los presupuestos de la Comunidad, todavía por aprobar en la Asamblea. Según este proyecto, la Comunidad aportaría 446 millones de euros al presupuesto del Consorcio en concepto de transferencias corrientes y otros 93 millones por transferencias de capital.

Por su parte, en los presupuestos municipales de 2004, aprobados en diciembre de 2003, la aportación al Consistorio se divide en 72.780.880 euros en concepto de aportación directa y 116.950.965 euros en transferencias de capital. Si el Ayuntamiento decide retirarse, también lo haría llevándose estas cantidades.

¿De quién es el metro?

El Ayuntamiento afirma que el 75% de las acciones de Metro de Madrid son de su propiedad y que el 25% restante está en manos de la Comunidad. Pero el Gobierno de Esperanza Aguirre da otra versión de este reparto: el Consistorio que preside Alberto Ruiz-Gallardón sólo es dueño del 75% de la red de metro existente antes de 1955.

¿La razón? En 1956, el Ministerio de Obras Públicas se hizo cargo de la ampliación del metro de Madrid y siempre corrió con todos los gastos. El Ayuntamiento, a partir de ese año, no pagó ninguno de estos costes. Como las competencias en el transporte público en la región fueron asumidas íntegramente por la Comunidad de Madrid cuando fue creada en 1983, "todas las líneas construidas desde 1956 corresponden al Gobierno, no al Ayuntamiento", según el Ejecutivo autonómico. Pero el Consistorio replica que el metro fue traspasado al Ayuntamiento, no a la Comunidad.

Fuentes del Ejecutivo de Aguirre manifestaron ayer que, de todas formas, "intentar deslindar lo que es del Ayuntamiento y de la Comunidad en una red tan amplia se puede convertir en un auténtico galimatías, porque, además, existen varias empresas públicas de la Comunidad que han participado en la ampliación y en la construcción o reforma de estaciones de líneas antiguas".

Además, Metro de Madrid alquila infraestructuras y material móvil a empresas públicas de la Comunidad como Mintra, que ha construido el Metrosur. Si el Ayuntamiento se sale del Consorcio de Transportes, el Consistorio podría dejar de pagar determinados servicios de Mintra que ya no le interesan porque salen fuera del término municipal.

El Gobierno mantiene que no es tan fácil abandonar el Consorcio como pretende Ruiz-Gallardón. A esto le responden fuentes municipales que en el convenio de adhesión del Ayuntamiento al Consorcio existe una cláusula que indica que cualquier ampliación futura de la red necesita el apoyo del Ayuntamiento, "ya que es el propietario del 75% de las acciones".

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