40 cuadros reflejan el esplendor y la vitalidad de la pintura genovesa
Bancaixa reúne en una muestra a pintores de los siglos XVI y XVII
Génova fue un núcleo primero comercial y luego financiero de primera magnitud durante los siglos XVI y XVII. La pintura que se desarrolló entonces alcanzó su gran esplendor gracias también a la financiación del oro español procedente de América. 40 cuadros de aquella época dorada, pertenecientes al Palazzo Bianco de la ciudad italiana, se exhibe desde ayer en el Centre Cultural Bancaixa de Valencia.
Las obras seleccionadas en la El esplendor de Génova. Pintura de los siglos XVI al XVIII en la colección del Palazzo Bianco son un reflejo de los años de esplendor de la ciudad, que e...
Génova fue un núcleo primero comercial y luego financiero de primera magnitud durante los siglos XVI y XVII. La pintura que se desarrolló entonces alcanzó su gran esplendor gracias también a la financiación del oro español procedente de América. 40 cuadros de aquella época dorada, pertenecientes al Palazzo Bianco de la ciudad italiana, se exhibe desde ayer en el Centre Cultural Bancaixa de Valencia.
Las obras seleccionadas en la El esplendor de Génova. Pintura de los siglos XVI al XVIII en la colección del Palazzo Bianco son un reflejo de los años de esplendor de la ciudad, que este año ha sido declarada capital cultural europea, junto a la francesa Lille. De ahí "el deseo de magnificencia" que se plasmó a través de la pintura y de la arquitectura, destacó el comisario Claudio di Fabia. Las familias dirigentes ansiaban dar "una imagen de clase" en consonancia con su crecimiento económico a raíz del apoyo de la familia Doria al emperador Carlos V.
La exposición, que se clausura el 29 de abril, reúne cuadros de pintores como Luca Cambiaso, Anton Maria Vassallo, Valerio Castello, Bernardo Strozzi, Alessandro Magnasco, Lorenzo de Ferrari o Domenico Fiasella. Las obras tiene el denominador común del "intenso colorido y de su vitalidad", agregó el comisario Destaca.
La notable Gallería di Palazzo Bianco de Génova contiene el patrimonio artístico de la antigua República de Génova. Se aloja en un edificio mandado construir por la familia Grimaldi en el XVI. La restauración del mismo en la actualidad ha permitido exhibir las obras ahora reunidas en Bancaixa y que con anterioridad se mostraron en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, con gran éxito de público.