En busca de un líder

Hay muy buenos mimbres, pero falta un líder. La renovación de la selección española realizada por César Argilés afronta hoy su primera prueba de fuego cuando se enfrente a Croacia (La 2, 18.00), campeón mundial, en su debú en el Europeo de Eslovenia, su primera cita oficial. Sin Duishebáev ni Masip, este equipo ya fue capaz de ganar la Supercopa de Naciones en Alemania el pasado mes de noviembre y mostró allí no sólo buenas maneras sino un potencial que le proyecta hacia el futuro. Sin embargo, todo aquello debe volver a demostrarlo en una competición oficial, donde se encontrará con algunas d...

Hay muy buenos mimbres, pero falta un líder. La renovación de la selección española realizada por César Argilés afronta hoy su primera prueba de fuego cuando se enfrente a Croacia (La 2, 18.00), campeón mundial, en su debú en el Europeo de Eslovenia, su primera cita oficial. Sin Duishebáev ni Masip, este equipo ya fue capaz de ganar la Supercopa de Naciones en Alemania el pasado mes de noviembre y mostró allí no sólo buenas maneras sino un potencial que le proyecta hacia el futuro. Sin embargo, todo aquello debe volver a demostrarlo en una competición oficial, donde se encontrará con algunas de las mejores selecciones mundiales luchando por las medallas.

España ha ganado capacidad de lanzamiento y, por tanto, previsiblemente marcará muchos goles tanto en los ataques posicionales como en el contraataque, una de sus armas más mortíferas. Argilés ha hecho una apuesta clara por la juventud y ha dado confianza a lanzadores de gran potencia como Belaustegui, Iker Romero, Alberto Entrerríos y a su hermano Raúl, que es un buen conductor del juego. Ha potenciado la segunda línea con Roberto García, Juanín, Prieto y Garabaya. Pero en cada línea mantiene algunos toques de veteranía y experiencia: Mariano Ortega y Lozano en la zona de los lanzadores; Pérez, O'Callaghan y Hernández, en la línea de seis metros; y, sobre todo, Barrufet y Hombrados, en una portería considerada la mejor del mundo.

Aunque fueron campeones en la Supercopa, el equipo ya mostró en Alemania algunas lagunas defensivas. Deben fortalecer su defensa, endurecerla y cerrar mejor los espacios para conseguir que la portería pueda responder con toda la calidad que atesora. Y el equipo debe encontrar un líder, un jugador que sea capaz de tirar del carro cuando las cosas se complican y de hacerlo con acierto. Pero eso no es algo que pueda improvisarse o incluso elegirse. Un líder sale por sí solo y se forja en las grandes competiciones. Por el momento aún no existe, puede que surja en este mismo campeonato. El equipo español es muy completo y tiene a varios jugadores capaces de coger el timón.

Frente a Croacia tendrán ocasión de comprobar hasta qué punto es importante un buen liderazgo. Los campeones del mundo tienen un motor llamado Ivano Balic, que sabe cómo sacar el máximo rendimiento a los experimentados lanzadores Metlicic, Lackovic y al recuperado (tiene ya 31 años) Bilic. Otra vez, Croacia no podrá contar con Patrick Cavar, lesionado. Pero sí con la experiencia de Dzombra y Sulic en la segunda línea. Estos hombres y su clásica defensa en 3-2-1 componen la base fundamental de la selección croata, capaz de ganar el Mundial en Portugal el año pasado después de haber concluido 14º en el Europeo de Suecia de 2002.

España tiene equipo para ser campeón europeo y, evidentemente, puede ganar a Croacia. Cuenta con un factor favorable muy importante: ya está clasificado para los JJ OO de Atenas y su aspiración principal debe ser entrar en las medallas para asegurarse una de las tres plazas (además de Croacia) que se conceden para el Mundial de Túnez de 2005 y evitarse así luchar por la clasificación el próximo mes de junio. Pero su misma ventaja puede convertirse en su problema. Selecciones como Suecia, Yugoslavia, Dinamarca o la anfitriona, Eslovenia, necesitan imperiosamente ganar la única plaza que está en juego para Atenas y defenderán a muerte sus opciones.

Valero Rivera es entrenador del Barça.