"El Estado no puede renunciar a garantizar la igualdad de oportunidades"

Jesús Caldera (Béjar, Salamanca, 1957) ha coordinado el trabajo de "mil personas" que ha dado como fruto "un proyecto más que un programa" para la España de los próximos años. Ahora se abre la discusión en el PSOE pero Caldera augura que no habrá reproches respecto a si es más o menos social; más o menos realizable. "Nos hemos preocupado de que todo cuadre, y cuadra".

Pregunta. Parece que la campaña se centrará en el modelo de Estado. El PP ya dice que lo que se dirime en las elecciones es si los españoles van a ser iguales entre comunidades. ¿Con qué proyecto se enfrentan a esa ...

Jesús Caldera (Béjar, Salamanca, 1957) ha coordinado el trabajo de "mil personas" que ha dado como fruto "un proyecto más que un programa" para la España de los próximos años. Ahora se abre la discusión en el PSOE pero Caldera augura que no habrá reproches respecto a si es más o menos social; más o menos realizable. "Nos hemos preocupado de que todo cuadre, y cuadra".

Pregunta. Parece que la campaña se centrará en el modelo de Estado. El PP ya dice que lo que se dirime en las elecciones es si los españoles van a ser iguales entre comunidades. ¿Con qué proyecto se enfrentan a esa idea tan extendida?

Respuesta. Nuestras línea esencial es la garantía de la igualdad de oportunidades. Es curioso que alguien como Rajoy, que con su gestión ha elevado los niveles de desigualdad, que ha favorecido que aumente la inseguridad ciudadana y ha consentido una subida de los precios de la vivienda inasumible y una gran precariedad laboral venga ahora a hablar de igualdad.

Queremos mantener la unidad de España a través del diálogo y respeto a la pluralidad

Dicen que sólo 150.000 personas ganan más de 10 millones. Es imposible

P. ¿Es compatible la reforma de los Estatutos con la solidaridad interterritorial?

R. Totalmente. El inmovilismo y rancio centralismo del PP aumenta las tensiones. Es el principal factor disgregador. En la historia de España se repite ese papel de la derecha. Las reformas que proponemos son sólo para modernizar. ¿Por qué no dejar que el Senado sea la voz de las autonomías? ¿Por qué no permitir que participen en las decisiones europeas? ¿Y una conferencia sectorial de presidentes de comunidades que se reúnan periódicamente con el Gobierno? ¿Acaso eso rompe España?

P. ¿Cuál es el hilo conductor de su programa?

R. Es moderno y con sensibilidad social. Hemos hecho un gran esfuerzo para que sea solvente. Han trabajado más de 1.000 personas muy cualificadas. Tenemos tres grandes objetivos: ampliar la esfera de derechos sociales, civiles y políticos de los ciudadanos; recuperar nuestro papel central en el Unión Europea, que hemos perdido por la guerra de Irak, y mantener la unidad de España a través del diálogo y el respeto a la pluralidad.

P. ¿Van a contraponer ustedes a Zapatero frente a Rajoy; es decir, además de la política, las personas?

R. Claro que sí. Zapatero es la modernidad, un nuevo talante en la forma de abordar la política y una gran sensibilidad social. Rajoy representa un proyecto antiguo. Estos días el cardenal Rouco defendía al PP en asuntos de tratamientos de derechos civiles. Tienen la misma visión. Yo no le he oído ni una idea nueva a Rajoy, que da una imagen de inmovilismo terrible.

P. ¿Cuáles son sus prioridades de gobierno?

R. La principal es la educación. Sin eso no hay desarrollo personal ni social. Nuestro sistema educativo tiene problemas serios. Repartir riqueza es en ocasiones difícil, pero repartir conocimiento no debería serlo.

P. La educación está transferida a las autonomías.

R. Sí, pero el Estado no puede renunciar a garantizar la igualdad de oportunidades y las mejoras de la calidad en la educación. Hay que incidir en nuevas tecnologías e idiomas, en especial el inglés, y aumentar la tasa de escolarización, tanto en el bachillerato como en la universidad.

P. ¿Piensan invertir la tendencia que hay ahora a favor de la educación concertada?

R. Hay que educar a todos entre todos. Los centros públicos y concertados, que se financian de forma pública, tienen las mismas obligaciones. Toda la red debe incorporar a los estudiantes inmigrantes o con dificultades de integración en la misma proporción. Eso lo vamos a garantizar.

P. ¿Y con qué dinero piensan hacer todas las mejoras?

R. No habrá incremento de gasto. Tenemos un rigurosísimo análisis coste-beneficio, que incluye aplicar a la Administración la exigencia de que evalúe sus políticas en función de sus resultados. Las reformas propuestas generarán un retorno económico que permitirá que el gasto no sea excesivo. Por ejemplo: ampliamos la educación infantil gratuita hasta la fase de 0 a 3 años. Eso genera actividad económica y empleo. El retorno a la Hacienda pública absorbe el gasto.

P. Pero al menos al principio aumentaría el déficit. ¿Ya no creen en el déficit cero?

R. Creemos en la estabilidad presupuestaria dentro del ciclo económico. Nos ponemos dos grandes límites. Uno, no se cobrarán más impuestos, se cobrarán mejor y aumentará la recaudación. Otro, el gasto público mantendrá su dimensión actual. El Gobierno presume de un superávit de 3.000 millones de euros en 2003. Nosotros creemos que se debe destinar de otra manera, si es que existe.

P. Si no suben impuestos ni gastos, ¿dónde está la diferencia con el PP?

R. Nosotros basamos el modelo en la productividad, no como el PP, que ha diseñado una economía centrada en el ladrillo especulativo.

P. ¿Esperan críticas desde su partido por un programa excesivamente liberal?

R. No creo que haya problemas. Este es un programa de fortísimo contenido social. También nos preocupa mucho la inseguridad ciudadana. Hay una profunda descoordinación entre los cuerpos. La policía tiene que actuar como si fuera una sola. Tenemos la tasa de homicidios más alta de la UE. Se cometen un millón de delitos más que hace ocho años.

P. ¿Cómo será su modelo fiscal?

R. Es un asunto esencial sobre el que estamos trabajando. El actual sistema es obsoleto. Es muy complejo y sobre todo injusto. El último IRPF dice que sólo hay 150.000 ciudadanos españoles que ganan más de diez millones de pesetas. Eso no se lo cree nadie. Sólo quien tiene una nómina paga de verdad impuestos.

P. ¿Es creíble presentar un programa sin el modelo fiscal?

R. Estamos trabajando. Espero que podamos tener diseñada una propuesta fiscal en sus principios básicos antes de la aprobación formal del programa en el Comité Federal, a principios de febrero.

P. Y también posponen la propuesta de financiación autonómica?

R. También lo presentaremos. Pero ya le avanzo que defendemos la equidad. Nadie perderá. Se garantizará la suficiencia financiera de todas las comunidades y la solidaridad interterritorial.

P. ¿Hay menos o más solidaridad interterritorial ahora?

R. Hacer análisis con la información de que disponemos es inútil. No sabemos cómo evolucionan las aportaciones de unas y otras autonomías, y no podemos fiarnos de los datos falsos del Gobierno.

P. ¿Se puede romper la máxima de que es el Gobierno quien pierde las elecciones y no la oposición quien las gana?

R. Creo que sí. Puedes ganar unas elecciones por tus propios méritos si tienes un buen proyecto y logras que los ciudadanos lo perciban. Esto último es un poco más difícil, por el poder omnímodo del PP sobre lo que llamamos el frente mediático.

P. El ciclo económico positivo sigue. ¿Usted percibe en la sociedad necesidad de cambio?

R. Ojalá continúe mucho tiempo ese ciclo. Pero los españoles saben que sus hijos, a pesar de tener mejor formación, no tienen empleo estable y no pueden independizarse por el precio de la vivienda. Saben también que no está resuelto el problema de los mayores dependientes. En algunas cosas no se ha avanzado nada y en otras se ha retrocedido.