Los cónyuges acusados de pegar a su bebé se culpan uno a otro
Los cónyuges Adrián Alberto G. y Norma Griselda C., acusados de maltratar a su bebé, se echaron ayer la culpa mutuamente de las graves heridas causadas a la cría, de 54 días de vida. Ambos fueron juzgados ayer en la Sección Séptima de la Audiencia de Madrid por un supuesto delito de asesinato en grado de tentativa. Según el fiscal, quien al término del juicio pidió para los acusados un total de 17 años y seis meses de cárcel, la niña fue maltratada desde su nacimiento y le quedan graves secuelas: ha perdido la visión fruto de los golpes recibidos por los padres.
Durante el juicio de aye...
Los cónyuges Adrián Alberto G. y Norma Griselda C., acusados de maltratar a su bebé, se echaron ayer la culpa mutuamente de las graves heridas causadas a la cría, de 54 días de vida. Ambos fueron juzgados ayer en la Sección Séptima de la Audiencia de Madrid por un supuesto delito de asesinato en grado de tentativa. Según el fiscal, quien al término del juicio pidió para los acusados un total de 17 años y seis meses de cárcel, la niña fue maltratada desde su nacimiento y le quedan graves secuelas: ha perdido la visión fruto de los golpes recibidos por los padres.
Durante el juicio de ayer, presidido por la magistrada Ana Ferrer, el padre responsabilizó a la madre de las lesiones que sufrió la chiquilla. Entre otras cosas, se amparó en una carta que firmó la madre, estando ambos en prisión, en la que ella asumía la responsabilidad de lo ocurrido al bebé. La madre responsabilizó al padre e indicó que la carta fue acordada por ambos con la finalidad de que uno de ellos pudiese quedar libre de cargos para encargarse de la niña.
La madre sostuvo que "nunca" había golpeado a su pequeña y que tampoco había observado ninguna señal en su cuerpo. Según dijo, decidió llevar a la niña a un centro médico al percatarse de que tenía "un tic" en la pierna y porque lloraba mucho y no comía. El progenitor de la entonces lactante aseguró que tanto él como su compañera sentimental, ambos nacidos en Buenos Aires, se ocupaban del cuidado de su hija. Indicó que nunca vio a su esposa golpear al bebé, aunque precisó que cuando los médicos le informaron de las lesiones que éste presentaba sospechó de la acusada. "Las heridas me dieron que pensar. Conmigo la niña no manifestaba rechazo y en un principio declaré ante el juez que pensé que mi pareja era la agresora", añadió Adrián.
Los médicos que atendieron a la niña en el hospital, y que inicialmente instaron la retirada de la tutela a los padres, ratificaron ayer el informe que describe las graves lesiones causadas a la menor. Las defensas pidieron la absolución de los acusados.