La estadística de accidentes laborales excluye a los inmigrantes sin papeles

El 35% de los muertos en el trabajo en Alicante son indocumentados

Trece de las 37 personas que el pasado año murieron en accidente laboral en la provincia de Alicante carecían de documentación para trabajar en España. La Administración no computa a esas 13 personas en sus estadísticas , por lo que, en el caso de Alicante, la siniestralidad laboral real es un 35% mayor que la admitida por Trabajo. Este dato lo contiene un estudio de la Universidad de Alicante sobre la precaridad laboral de los inmigrantes.

Los requisitos documentales que la legislación exige para renovar o modificar las condiciones de permiso de residencia empujan a los inmigrantes a l...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Trece de las 37 personas que el pasado año murieron en accidente laboral en la provincia de Alicante carecían de documentación para trabajar en España. La Administración no computa a esas 13 personas en sus estadísticas , por lo que, en el caso de Alicante, la siniestralidad laboral real es un 35% mayor que la admitida por Trabajo. Este dato lo contiene un estudio de la Universidad de Alicante sobre la precaridad laboral de los inmigrantes.

Los requisitos documentales que la legislación exige para renovar o modificar las condiciones de permiso de residencia empujan a los inmigrantes a la precariedad laboral y, por tanto, les convierten en el colectivo con mayor riesgo de sufrir accidentes en el trabajo. Ésta es una de las conclusiones de un estudio del sociólogo y profesor de la Universidad de Alicante Carlos Gómez sobre la situación sociolaboral de los extranjeros.

En el informe, el experto advierte de que la falta de formación de los extranjeros y la temporalidad en el empleo les convierten en presa fácil de los accidentes de trabajo. El pasado año, el fiscal de delitos laborales de Alicante, Miguel Gutiérrez, contabilizó un total de 37 personas muertas mientras desempeñaban su oficio. Las cifras distaban de las aportadas por la Administración. Los sindicatos CC OO y UGT explican así este baile de cifras: "Trabajo no computa los accidentes de inmigrantes indocumentados dado que éstos no constan como trabajadores. Ni siquiera la memoria anual del Consejo Económico y Social de la Comunidad Valenciana (CES), órgano consultivo de la Generalitat, menciona a los inmigrantes en sus estadísticas.

Carlos Gómez sostiene que en la población inmigrante indocumentada "concurren una serie de circunstancias que la hacen más vulnerable" a los accidentes de trabajo. Los irregulares suelen concentrarse en actividades que destacan, según Gómez, por su mayor accidentalidad y sus lamentables condiciones laborales. A ello, se suma la escasa formación para desempeñar estas funciones. "Los inmigrantes sin formación, con escasa o nula capacidad de negociación, en muchas ocasiones sin relación contractual que necesitan con angustia un trabajo que les aporte unos ingresos económicos absolutamente vitales, son sujetos especialmente vulnerables a tener accidentes de trabajo", señala el especialista.

La exigencia de cotizar a la Seguridad Social un número mínimo de meses para poder renovar los permisos, los "engorrosos requisitos" para poder cambiar de empresa, de sector o, incluso de provincia, y los "enormes retrasos" que en estos momentos acumulan las oficinas de extranjeros de Alicante y Valencia en tramitar los papeles para inmigrantes y empresarios son factores que, según el experto, añaden más precariedad, inestabilidad y vulnerabilidad a este sector.

Según datos recabados por Carlos Gómez, la provincia de Alicante registró el pasado año 37 muertes por accidente en el trabajo, 13 de ellos inmigrantes. Gómez lamenta que estos últimos no figuren en las estadísticas oficiales.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

La situación legal y documental de estas personas las expulsa, según el sociólogo, fuera de las estadísticas oficiales, a pesar de la "importante" incidencia de enfermedades profesionales en este colectivo. "Su trabajo en condiciones muy precarias incrementa el alcance de sus lesiones", apunta. Así por ejemplo, en la agricultura, los inmigrantes participan en los procesos de abono, sulfatos y herbicidas. En el calzado y las fábricas de plásticos, este colectivo trabaja en contacto con colas, pegamentos y productos químicos, dañinos a corto plazo. Y en la construcción están abocados a las tareas potencialmente más arriesgadas.

Archivado En