El Poder Judicial reduce a la mitad el profesorado de la Escuela Judicial
El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) asumió ayer la propuesta del Consejo Rector de la Escuela Judicial de reducir a la mitad el claustro de dicho centro de formación de jueces, que pasará de los actuales 14 profesores a sólo siete. Tanto en la decisión del Consejo Rector como en la del CGPJ fue decisivo el voto del presidente, Francisco José Hernando.
El lunes último, en el Consejo Rector de la Escuela Judicial, ubicada en Barcelona, se produjo un empate respecto a la propuesta del director, Francisco Valls Gombau, de reducir a la mitad el profesorado a partir de sept...
El pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) asumió ayer la propuesta del Consejo Rector de la Escuela Judicial de reducir a la mitad el claustro de dicho centro de formación de jueces, que pasará de los actuales 14 profesores a sólo siete. Tanto en la decisión del Consejo Rector como en la del CGPJ fue decisivo el voto del presidente, Francisco José Hernando.
El lunes último, en el Consejo Rector de la Escuela Judicial, ubicada en Barcelona, se produjo un empate respecto a la propuesta del director, Francisco Valls Gombau, de reducir a la mitad el profesorado a partir de septiembre próximo, dada la reducción del número de jueces en prácticas, de 233 a 124. El voto de calidad de Hernando hizo que prosperara la propuesta, muy criticada por el sector progresista.
En el pleno de ayer, 10 vocales (los siete propuestos por el PSOE y los tres designados a iniciativa de PP-PSOE, CiU e IU, respectivamente) plantearon una modificación: que la reducción fuera sólo de 14 a 10 profesores.
Por ausencia de Adolfo Prego, vocal propuesto por el PP, el pleno del CGPJ lo componían ayer 20 consejeros. Los 10 proponentes votaron a favor, tras lo cual el presidente decidió que no continuara la votación, puesto que, al no obtener la mayoría de 11 votos, la propuesta quedaba rechazada. Él y los nueve consejeros restantes no votaron.
Según el vocal progresista Luis Aguiar, al no realizar la reducción del profesorado "con prudencia" y sin perjudicar al centro, "se condena a una institución clave para la formación de nuestros futuros jueces y para el Estado de derecho, a condiciones precarias, en aras de un sedicente ahorro de gasto público".