La asamblea de Cierval aclama a Ferrando para un tercer mandato como presidente
El dirigente empresarial apuesta por el consenso y el capitalismo con rostro humano
No hizo falta recurrir a las urnas. Rafael Ferrando fue aclamado ayer como presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunidad Valenciana (Cierval) por los miembros de la asamblea empresarial congregados en Valencia. Ferrando abrió su tercer mandato al frente de la patronal autonómica con un breve discurso que reivindicó el peso de Cierval como interlocutor social después de años de vertebración. También deslizó dos apuntes personales, su vocación de consenso y la defensa de un capitalismo con rostro humano.
Ferrando accedió a la presidencia de Cierval en 1997...
No hizo falta recurrir a las urnas. Rafael Ferrando fue aclamado ayer como presidente de la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunidad Valenciana (Cierval) por los miembros de la asamblea empresarial congregados en Valencia. Ferrando abrió su tercer mandato al frente de la patronal autonómica con un breve discurso que reivindicó el peso de Cierval como interlocutor social después de años de vertebración. También deslizó dos apuntes personales, su vocación de consenso y la defensa de un capitalismo con rostro humano.
Ferrando accedió a la presidencia de Cierval en 1997 con un proyecto definido, acercar a la realidad empresarial la representación que ejerce la patronal autonómica. Las cuotas provinciales y las presidencias rotatorias pasaron a la historia. A tenor de los resultados de la asamblea general de Cierval celebrada ayer en Valencia la estrategia funcionó. Ferrando fue aclamado sin fisuras como portavoz patronal y reclamó con conocimiento de causa su fuerza como interlocutor social. "Es necesario que el Gobierno de España escuche a las empresas antes de pactar normativas en Bruselas que tienen absoluta repercusión en nuestra actividad", leyó en su discurso, "se debe legislar teniendo en consideración al administrado".
En unas breves declaraciones posteriores matizó sus palabras: "Cualquier administración inteligente atiende a los administrados antes de legislar y los empresarios queremos que nuestra opinión se tenga en cuenta, no queremos que prevalezca, sólo que se atienda nuestra posición", comentó.
La composición de los órganos de gobierno de Cierval apenas sufre variaciones. Cambia algún nombre. La modificación más visible es la cuarta vicepresidencia en el comité ejecutivo que corresponde al presidente de Cepymeval desde su incorporación a Cierval. El relevo al frente de Femeval, la patronal del metal, se traduce en la vicepresidencia que ocupa José Vicente González, quien sustituye a Antonio Almerich.
En un breve repaso de la situación económica Ferrando apeló desde el principio a un esfuerzo por la modernización del tejido empresarial valenciano: "La incertidumbre económica no termina de despejar sus sombras", leyó, "el mundo se encuentra ante situaciones nuevas tanto de índole económica como geopolítica; podemos afirmar que los viejos mecanismos de la economía no resuelven la situación actual y los nuevos no acaban de ajustarse".
Ferrando defendió políticas de ajuste monetario para compensar la elevada cotización del dólar, invocó la estabilidad presupuestaria y pidió austeridad en el gasto público para poder rebajar la presión fiscal.
En el ámbito interno, Ferrando apostó por impulsar las oficinas comarcales de Cierval para extender la influencia de la patronal y por reforzar la cooperación en todos los foros relacionados con I+D+i, formación y empleo, medio ambiente o salud laboral. También subrayó en varias ocasiones la importancia que concede a la incorporación de Cepymeval a la patronal autonómica a lo largo del pasado ejercicio.