La entrega de Elián a su padre desata una tormenta sobre Clinton

La rabia del exilio cubano estalla en batalla campal con la policía en Miami

Elián González colocó sus brazos alrededor de su padre, Juan Miguel, y parecía feliz. Ésta es la versión del reencuentro, a las 9.30 de ayer en Washington (15.30 en España), tras cinco meses de separación, entre el niño balsero y su padre que fue facilitada por el Departamento de Justicia de EE UU. Cuatro horas antes, a las 5.15, agentes del Servicio de Inmigración habían irrumpido violentamente en la casa del tío abuelo de Elián en Miami para sacar al niño y trasladarlo a Washington. Las imágenes del "rescate" de un Elián aterrorizado, tomadas por un fotógrafo que logró introducirse en la cas...

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Elián González colocó sus brazos alrededor de su padre, Juan Miguel, y parecía feliz. Ésta es la versión del reencuentro, a las 9.30 de ayer en Washington (15.30 en España), tras cinco meses de separación, entre el niño balsero y su padre que fue facilitada por el Departamento de Justicia de EE UU. Cuatro horas antes, a las 5.15, agentes del Servicio de Inmigración habían irrumpido violentamente en la casa del tío abuelo de Elián en Miami para sacar al niño y trasladarlo a Washington. Las imágenes del "rescate" de un Elián aterrorizado, tomadas por un fotógrafo que logró introducirse en la casa con los agentes federales, han perturbado a la opinión pública norteamericana y causarán más de un disgusto político al presidente Bill Clinton, que ayer recibió fuertes críticas. Clinton justificó la operación por la necesidad de "aplicar la ley", y la fiscal general de EE UU, Janet Reno, explicó que no tuvo más remedio que ordenar la intervención porque los familiares del niño rechazaban cualquier entrega negociada del pequeño a su padre. La operación desató la ira de los exiliados cubanos en Miami que se echaron a la calle y encendieron fogatas, cortaron el tráfico y corearon eslóganes contra Clinton y Reno. La policía practicó más de cien detenciones. En La Habana, en cambio, el Gobierno pidió calma a la población, al tiempo que calificó de "grata noticia" la entrega del niño, aunque recalcó que la lucha no ha acabado.

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