Un incendio calcina una vivienda en San Blas sin causar heridos

Las llamas salían por las ventanas del piso al llegar los bomberos

Una vivienda situada en el primer piso del número 36 de la calle de Albericia, en el distrito de San Blas, resultó totalmente calcinada por un incendio que se produjo alrededor de las 8.30 de ayer. Ningún vecino del inmueble resultó herido, y el Samur-Protección Civil sólo atendió a una persona con una crisis de ansiedad. Los bomberos tardaron unos 20 minutos en sofocar el fuego.

Las llamas escapaban incontroladas por las ventanas del piso incendiado cuando llegaron los bomberos del Ayuntamiento de Madrid al número 36 de la calle de Albericia, en el distrito de San Blas. "El incendio er...

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Una vivienda situada en el primer piso del número 36 de la calle de Albericia, en el distrito de San Blas, resultó totalmente calcinada por un incendio que se produjo alrededor de las 8.30 de ayer. Ningún vecino del inmueble resultó herido, y el Samur-Protección Civil sólo atendió a una persona con una crisis de ansiedad. Los bomberos tardaron unos 20 minutos en sofocar el fuego.

Las llamas escapaban incontroladas por las ventanas del piso incendiado cuando llegaron los bomberos del Ayuntamiento de Madrid al número 36 de la calle de Albericia, en el distrito de San Blas. "El incendio era más espectacular que peligroso, debido a que el fuego se observaba desde la calle, pero es uno más de los que se producen habitualmente en Madrid", explicó un portavoz de los bomberos.

El fuego comenzó alrededor de las 8.30 del domingo en el primer piso del edificio, por causas que aún se desconocen y que los bomberos investigan.

A pesar de la aparatosidad del suceso, todos los vecinos consiguieron escapar sanos y salvos a la calle, aunque la caja de la escalera se encontraba completamente inundada por el humo que había partido de la vivienda cuando llegaron los bomberos.

La única asistencia que tuvo que realizar el Samur-Protección Civil fue la de una persona que sufrió una crisis de ansiedad. Al lugar se desplazaron cuatro coches de bomberos y 23 hombres, que tardaron entre 15 y 20 minutos en apagar el fuego.

Media hora después refrescaban y ventilaban el inmueble para permitir a los vecinos afectados volver a sus viviendas, y al poco tiempo abandonaban el lugar.

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Los bomberos no pudieron salvar el piso donde se produjo el fuego, que quedó totalmente destrozado.

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