Entrevista:PAUL LAVERTY | Guionista de Ken Loach | NOTICIAS Y RODAJES

"Harrison Ford también hace cine político y lo llaman de acción"

Paul Laverty fue, antes que escritor de películas, abogado especialista en derecho penal y civil. A finales de los años ochenta vivió en Nicaragua y Guatemala, aprendió español y sentó buena parte de las bases ideológicas que hoy mueven su cine. Laverty (Calcuta, India, 1957) y Ken Loach forman un sólido equipo de trabajo. Desde La canción de Carla (1996) -primera colaboración entre el guionista y el director- han realizado juntos Mi nombre es Joe (1998), Pan y rosas (2000), y ahora, Sweet sixteen. La película, situada en Greenock, en el puerto de Glasgow (donde el ...

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Paul Laverty fue, antes que escritor de películas, abogado especialista en derecho penal y civil. A finales de los años ochenta vivió en Nicaragua y Guatemala, aprendió español y sentó buena parte de las bases ideológicas que hoy mueven su cine. Laverty (Calcuta, India, 1957) y Ken Loach forman un sólido equipo de trabajo. Desde La canción de Carla (1996) -primera colaboración entre el guionista y el director- han realizado juntos Mi nombre es Joe (1998), Pan y rosas (2000), y ahora, Sweet sixteen. La película, situada en Greenock, en el puerto de Glasgow (donde el Gobierno cerró los astilleros dejando en paro a miles de trabajadores), narra la historia de Liam, un adolescente duro y tenaz que trapichea con drogas y que sueña con sacar a su madre del sórdido ambiente que la atrapa. Sweet sixteen se estrena en España el próximo 10 de enero. La película logró el premio al mejor guión en el pasado Festival de Cannes y la Espiga de Oro en el de Valladolid.

"Contar tragedias es una manera de reflexionar sobre la vida"

Pregunta. Esta película fue clasificada por el British Film Clasification Board para mayores de 18 años, el mismo rango que dan a las películas pornográficas...

Respuesta. Sí. Ridículo. Censura total. Una mezcla de estupidez y prejuicio pijo. Es la primera vez que ocurre con una película de Ken [Loach], y todo por la palabra "coño"; al parecer, esta palabra ofende sus sensibilidades. Los chicos de la película hablan como lo hacen en la calle y eso les ha molestado, les ha ofendido. Tenemos películas celebrando la guerra o la explotación humana y eso no les ofende. Pero sí les ofende escuchar cómo se habla en las calles. Afortunadamente, la película se ha convertido en un éxito dentro de los circuitos piratas y, además, como cada gobierno local puede cambiar la clasificación, algunos lo han hecho y ha sido un éxito. Es una decisión absurda que retrata perfectamente su doble moral.

P. Al parecer su trabajo con Ken Loach va más allá del guión.

R. Sí, es una colaboración de principio a fin, un trabajo muy orgánico, buscamos juntos los lugares donde se rodará, hacemos el casting juntos...

P. Eso no es muy habitual.

R. Eso me dicen. Pero para nosotros nunca está cerrado el guión y a Ken no le importa que vaya al rodaje, algo que normalmente no hacen los escritores. Ken cree mucho en el trabajo de equipo.

P. ¿Y no discuten nunca?

R. Pues la verdad es que no. Es todo muy tranquilo. Yo no me creo que soy el Papa y acepto cualquier sugerencia o cambio. Escribir es probar, pierdes una cosa, pero ganas otra; todo es muy sutil. Además, una película tiene muchos flecos y no se pueden controlar todos.

P. La película presenta una realidad muy dura y lo hace sin demasiada esperanza. Es un cine bastante pesimista.

R. Las películas no se pueden reducir a una sola realidad, deben responder a muchas diferentes. Las películas son pesimistas, pero también son optimistas. Sí, hablamos de una tragedia, pero es que la tragedia, lo trágico, es una manera de reflexionar sobre la vida.

P. Los chicos de esta película viven prácticamente en la calle. Ni escuela, ni familia.

R. Las condiciones que se reflejan responden a un largo trabajo de documentación. Uno de cada tres chicos de la zona vive en la pobreza y uno de cada cuatro pertenece a una familia sin trabajo. Esto es un escándalo que no tiene nada que ver con la imagen de prosperidad que presentan líderes europeos como Blair, Aznar o Berlusconi.

P. Parece que no le gusta la etiqueta de cine social o político.

R. No. Para mí, por ejemplo, Peligro inminente, de Harrison Ford, la estrella oficial de la CIA, no es cine de acción, sino cine político, es pura propaganda. A nuestras películas les ponen la etiqueta de película social o política y así logran a arrinconarla, pero las suyas, como cuestan millones de dólares, no son políticas, sino de entretenimiento. Menudo cinismo.

P. Una película española, de las llamadas sociales, Los lunes al sol, está logrando un gran éxito de público.

R. No he visto todavía Los lunes al sol, pero me han hablado de ella, como de Smooking-room, otra película que busca tener un contenido ideológico. De todas formas, Los lunes al sol no funciona por ser cine social, lo hace por otros motivos. Una buena historia, unos buenos actores...

P. Ken Loach y usted decidieron que su capítulo dentro de la película 11.09.01 hablara sobre otro 11 de septiembre, el del golpe de Estado de Augusto Pinochet contra el Gobierno de Salvador Allende.

R. Recibimos algunas críticas dentro de Gran Bretaña por elegir este tema. Un articulista del London Evening Standard, un conocido derechista, dijo que éramos una vergüenza para nuestro país. Estas cosas son inevitables. Pero lo cierto es que hay más muertos a manos de ciertos Estados que por el terrorismo de Al Qaeda.

Paul Laverty, ayer, en unos cines de Madrid.CLAUDIO ÁLVAREZ
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