La saga que no cesa

La saga granadina de los Habichuela continúa en el flamenco con una presencia importante. Pepe Habichuela es siempre de lo más gratificante, pero junto a él, en el minúsculo tablao de Clamores, se encontraban su hermano Carlos (segunda guitarra), su sobrino Nono Carmona (percusión) y otro sobrino, Pepe Luis (cante).

Con ellos, más Bandolero también en percusiones, la última sesión del ciclo fue un éxito más de este Encuentro flamenco. Tres días a tope de público y con una respuesta artística excelente dan idea del acierto organizativo, que por lo que adelantan ya va a insistir en...

La saga granadina de los Habichuela continúa en el flamenco con una presencia importante. Pepe Habichuela es siempre de lo más gratificante, pero junto a él, en el minúsculo tablao de Clamores, se encontraban su hermano Carlos (segunda guitarra), su sobrino Nono Carmona (percusión) y otro sobrino, Pepe Luis (cante).

Con ellos, más Bandolero también en percusiones, la última sesión del ciclo fue un éxito más de este Encuentro flamenco. Tres días a tope de público y con una respuesta artística excelente dan idea del acierto organizativo, que por lo que adelantan ya va a insistir en la programación de flamenco.

Pepe Habichuela hizo un concierto de música muy flamenca, apoyándose fundamentalmente en las percusiones. Música directa, que el público asimila fácilmente y celebra con entusiasmo. Me hubiera gustado oírle más temas a solas con su guitarra, pero sólo hizo la soleá inicial.

Habichuela pareció un poco tenso en principio, teniendo en cuenta su experiencia, pero con las alegrías fue retomando su habitual dominio escénico hasta completar un concierto de estilos flamencos brillante. Los dos jóvenes percusionistas tuvieron también muy destacadas actuaciones.