IU anuncia su oposición a la reforma de la Ley de Costas, que imputa al 'ala más especuladora del PP'
El diputado de IU por Málaga, José Luis Centella, alertó ayer sobre los 'efectos devastadores' de las reformas de la Ley de Costas planteadas en la ley de acompañamiento a los Presupuestos Generales del Estado para 2003, que, entre otras cosas, reducen de 100 a 20 metros la zona de servidumbre de protección marítimo-terrestre y limitan las competencias de las comunidades autónomas en materia de costas.
Centella anunció la presentación de una enmienda de supresión de los artículos que modifican la Ley de Costas y lamentó que 'se emplee una fórmula como la ley de acompañamiento de los pre...
El diputado de IU por Málaga, José Luis Centella, alertó ayer sobre los 'efectos devastadores' de las reformas de la Ley de Costas planteadas en la ley de acompañamiento a los Presupuestos Generales del Estado para 2003, que, entre otras cosas, reducen de 100 a 20 metros la zona de servidumbre de protección marítimo-terrestre y limitan las competencias de las comunidades autónomas en materia de costas.
Centella anunció la presentación de una enmienda de supresión de los artículos que modifican la Ley de Costas y lamentó que 'se emplee una fórmula como la ley de acompañamiento de los presupuestos, que apenas tiene trámite ni debate, para modificar sustancialmente una ley tan sensible'.
El diputado malagueño señaló que 'detrás de estos cambios está el ala más especuladora del PP' y aseguró que, de mantenerse las modificaciones, 'se abrirá la puerta para la degradación total del litoral'. Centella insistió en que las modificaciones significan 'una renuncia a los objetivos primordiales de la Ley de Costas, que proponía soluciones que no sólo no se han agotado, sino que apenas estaban empezando a ponerse en marcha'.
El diputado se mostró especialmente alarmado por el hecho de que las reformas no se circunscriban sólo a obras de interés general, sino también a la construcción de viviendas, que en el borrador de la ley de acompañamiento se permiten si los planes urbanísticos las contemplan y se ajustan a determinadas condiciones. 'Los planes urbanísticos hasta ahora se tenían que ceñir a la protección del litoral, y ahora es justo al contrario', protestó.
Centella criticó también la introducción de otras reformas en la Ley de Costas a través de la normativa de contratos con las administraciones públicas; cambios que posibilitan otorgar la explotación total o parcial de servicios de playa (chiringuitos, etc.) a empresas privadas que asuman la creación, regeneración o acondicionamiento de las playas. 'Esto obliga a preguntarse cómo quedarían los actuales concesionarios de los servicios y los propios ayuntamientos', comentó Centella.