GENTE

GLORIA TREVI, DE LA CÁRCEL AL CONVENTO

El Tribunal Supremo de Brasil autorizó ayer que la cantante mexicana Gloria Trevi, detenida en este país para ser extraditada a México, cumpla prisión domiciliaria en un convento de Brasilia, con su bebé, Ángel Gabriel, nacido en la cárcel el pasado febrero, según fuentes judiciales. El Supremo autorizó la prisión domiciliaria después de que la defensa de la cantante, detenida en Río de Janeiro en enero de 2000, junto a su compañero y representante, Sergio Andrade, y su amiga María Raquel Portillo, conocida como Mary Boquitas, acusados de secuestro y a...

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El Tribunal Supremo de Brasil autorizó ayer que la cantante mexicana Gloria Trevi, detenida en este país para ser extraditada a México, cumpla prisión domiciliaria en un convento de Brasilia, con su bebé, Ángel Gabriel, nacido en la cárcel el pasado febrero, según fuentes judiciales. El Supremo autorizó la prisión domiciliaria después de que la defensa de la cantante, detenida en Río de Janeiro en enero de 2000, junto a su compañero y representante, Sergio Andrade, y su amiga María Raquel Portillo, conocida como Mary Boquitas, acusados de secuestro y abuso de menores, entregara una copia de la decisión del juez mexicano Juan Ramírez Días, que declara inconstitucional la petición de extradición del Gobierno de México. El pequeño Ángel Gabriel nació en un hospital de Brasilia en febrero pasado y fue concebido en la cárcel, en condiciones que la cantante no ha querido aclarar. Por una parte, Trevi denunció que fue víctima de abusos sexuales y violación por parte de policías brasileños, versión que ratificó una compañera de celda. Por otra parte, los responsables de su custodia en prisión alegan que la cantante se autoinseminó con esperma de Andrade, lo que ha sido confirmado por un análisis genético. Andrade, por ahora deberá seguir en la cárcel, ya que el beneficio de la prisión domiciliaria sólo es para Trevi, su hijo y Mary Boquitas.

Gloria Trevi sonríe ayer, con su bebé en brazos, al abandonar la celda de una comisaría de Brasilia.REUTERS

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