Entrevista:FERNANDO DOBLAS | Responsable de la ESA en la base espacial de Kourou

'Estudiamos la posibilidad de lanzar cohetes Soyuz desde la base europea'

El ingeniero español Fernando Doblas es el responsable de la Agencia Europea del Espacio (ESA) en la base de Kourou (Guyana Francesa), desde donde han salido al espacio ya un centenar y medio de cohetes Ariane en sus diferentes modelos y configuraciones. Actualmente esta base espacial atraviesa un momento critico de evolución, con la posibilidad de lanzar cohetes rusos Soyuz, preparando a la vez la llegada de los pequeños lanzadores europeos VEGA, y culminando la puesta a punto de la versión más potente del Ariane 5. Doblas, 45 años, está metido de lleno en esta renovación, incluso durante las...

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El ingeniero español Fernando Doblas es el responsable de la Agencia Europea del Espacio (ESA) en la base de Kourou (Guyana Francesa), desde donde han salido al espacio ya un centenar y medio de cohetes Ariane en sus diferentes modelos y configuraciones. Actualmente esta base espacial atraviesa un momento critico de evolución, con la posibilidad de lanzar cohetes rusos Soyuz, preparando a la vez la llegada de los pequeños lanzadores europeos VEGA, y culminando la puesta a punto de la versión más potente del Ariane 5. Doblas, 45 años, está metido de lleno en esta renovación, incluso durante las ajetreadas jornadas del reciente lanzamiento del satélite de la ESA Envisat.

Pregunta. La base espacial de Guyana no se limita a lanzar cohetes al espacio.

'La industria espacial española se mueve en el área de proveedores de equipos'
'A largo plazo, podríamos hablar del avión espacial, una costosa aventura'
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Respuesta. Los lanzamientos son la actividad principal de la base. Además tenemos fábricas de producción de elementos del lanzador. La construcción de nuevas instalaciones también ocupa un puesto importante. Finalmente están las actividades de desarrollo y ensayos de nuevos programas de lanzadores, como Ariane 5 Plus.

P. ¿Qué capacidad tendrá ese nuevo modelo?

R. Podrá colocar 10 toneladas de carga en órbita geoestacionaria [a 36.000 kilómetros de altura], mientras que el modelo actual tiene una capacidad de algo más de seis toneladas. Es, básicamente, el mismo cohete que se ha utilizado para lanzar el Envisat pero cambia la etapa superior. El primer vuelo está previsto para agosto de este año.

P. Hay satélites de diez toneladas en órbita geoestacionaria?

R. Todavía no. Pero Ariane 5 está dimensionado para hacer lanzamientos dobles. El nuevo modelo podrá poner en órbita un satélite de seis toneladas y otro de cuatro, por ejemplo. Además, se trata de adaptar el lanzador a la evolución de los satélites comerciales de telecomunicaciones, que son cada vez más complejos y más grandes.

P. ¿Una vez que termina el desarrollo de los sistemas espaciales, la ESA se los pasa a la empresa que los comercializa?

R. En el caso de los programas de aplicaciones o de lanzadores, sí. De la explotación y comercialización de los cohetes se encarga Arianespace; Eutelsat se creó precisamente para explotar los satélites de telecomunicaciones, y Eumetsat para los de meteorología. La vocación principal de la ESA es el desarrollo de nuevas tecnologías espaciales. Pero en los programas científicos y en los de observación de la Tierra, como Envisat, la ESA se ocupa también de la operación durante su vida útil.

P. Usted ha señalado, entre las actividades en la base, la construcción de nuevas plataformas de lanzamiento.

R. Sí. A finales de este año empezará la construcción de la plataforma de Vega, el nuevo cohete europeo que se lanzará desde aquí en 2006. Es un lanzador pequeño, capaz de poner en órbita, a 700 kilómetros de altura, una tonelada y media de carga.

P. ¿Y los Soyuz rusos?

R. Estamos haciendo muchísimo trabajo de análisis, estudiando los distintos aspectos, como cuánto costarían las instalaciones para lanzar Soyuz desde Kourou, la financiación del proyecto, las repercusiones que tendría en Ariane o qué acuerdos se establecerían con los rusos y la cuestión de la exclusividad.

P. ¿Qué ganaría Europa con los Soyuz en Kourou?

R. Hay varios puntos y no sé cuál será la decisión final. A favor del acuerdo está el hecho de que en el horizonte 2005-2006, Ariane 5 tendrá una capacidad de 12 toneladas de carga en órbita geoestacionaria, pero seguirá habiendo satélites más pequeños y parece lógico que un operador de lanzadores ofrezca una gama adaptada y optimizada para diferentes cargas. Soyuz puede poner en órbita geoestacionaria desde Kourou hasta 2,8 toneladas. Así, Arianespace tendría un lanzador pesado (Ariane 5), uno pequeño (Vega) y uno intermedio (Soyuz).

P. ¿Y las repercusiones negativas?

R. La cuestión es si Soyuz quitaría o daría clientes a Ariane 5, que es la prioridad número uno porque es el lanzador que proporciona a Europa la autonomía de acceso al espacio y porque cada lanzamiento supone mucho trabajo para las empresas europeas. Estamos estudiando si el riesgo de traer el Soyuz sería menor que las ventajas. Y hay que contar también con el hecho de que los competidores estadounidenses de Arianespace han captado ya todas las capacidades de los rusos, excepto el sistema Soyuz.

P. Europa tiene un porcentaje muy alto del mercado mundial de lanzamientos.

R. Sí. Arianespace tiene más del 50% del mercado accesible de lanzamientos, pero este es sólo una parte pequeña del total. La porción más grande es la que tienen los estadounidenses para los lanzamientos que ellos llaman gubernamentales, limitados a la industria americana. Como el mercado institucional europeo es sensiblemente inferior, en particular porque no hay un programa militar espacial grande como el estadounidense, Arianespace juega con esta desventaja frente a los competidores americanos.

P. ¿Cuántos lanzamientos se hacen en Kourou anualmente?

R. En un año bueno hasta 12. El objetivo de 2002 es 14. A finales de este mes lanzamos con Ariane 4 dos satélites fabricados por Boeing. También tenemos este año el Meteosat de segunda generación, el Spot 5, el Rosetta, el Stentor, etcétera. En resumen, un año bien cargado.

P. ¿Cuántas personas trabajan en la base?

R. Unas 1.600 sumando la gente del centro técnico de CNES/CSG [agencia espacial francesa], los industriales, los empleados de Arianespace y el equipo de la ESA. Estamos viviendo una fase muy interesante, no sólo por la posibilidad de Soyuz y por Ariane 5 y Vega, sino también por los replanteamientos sobre el papel de las agencias nacionales y de la ESA, la integración de la industria europea, etcétera. También estamos facilitando el acceso de las empresas europeas a las posibilidades de trabajo que ofrece la base, ya que los estados miembro de la ESA participan de manera importante en su financiación.

P. ¿Qué lugar ocupan las empresas españolas en el panorama espacial europeo?

R. La industria española es muy competitiva. Pero con una participación financiera en la ESA del orden del 4,5% del presupuesto, España se mueve principalmente en el área de proveedores de equipos. Algunas empresas, como CASA, logran responsabilidades a nivel de subsistemas y esporádicamente a nivel de sistema, pero es muy difícil porque para eso hay que tener medios, capacidad e infraestructura.

P. La tecnología de propulsión ha avanzado mucho, pero la idea básica de los cohetes no ha cambiado desde hace décadas y se espera una auténtica revolución de lanzadores. ¿Cómo ve la ESA el panorama?

R. Hemos tenido algunos programas de preparación de futuros lanzadores. Ahora estamos diseñando uno nuevo, el FLPP (Programa de de Preparación de Futuros Lanzadores) y una de las opciones a considerar es la colaboracion con los rusos.

P. ¿Cuál es la perspectiva?

R. Serían varias etapas: primero, los lanzadores reutilizables: un cohete que en lugar de destruirse cada vez que lo lanzas, lo recuperes, todo o parte, para abaratar los costes de lanzamiento. Luego, a largo plazo, podríamos hablar del avión espacial, para el que hacen falta nuevas tecnologías; es una gran y costosa aventura.... y pasarán algunas décadas antes de que sea realidad.

Fernando Doblas, en el área Júpiter de la base espacial de Kourou (Guyana Francesa).A. R.