Los recursos públicos se han multiplicado por 11 en 18 años gracias al Concierto
El Concierto Económico ha contribuido al bienestar de los ciudadanos, pero no es posible cuantificas su impacto, según indicó ayer la catedrática de la UPV Inmaculada Gallastegui al presentar el estudio El Concierto Económico y la economía vasca, editado por Caja Laboral. El informe analiza los 20 años de vigencia del Concierto en relación con la creación del sector público vasco y la evolución económica de la comunidad autónoma durante el periodo. Este instrumento, ahora en fase de renegociación, ha hecho que los recursos administrados por las instituciones vascas se multiplicara...
El Concierto Económico ha contribuido al bienestar de los ciudadanos, pero no es posible cuantificas su impacto, según indicó ayer la catedrática de la UPV Inmaculada Gallastegui al presentar el estudio El Concierto Económico y la economía vasca, editado por Caja Laboral. El informe analiza los 20 años de vigencia del Concierto en relación con la creación del sector público vasco y la evolución económica de la comunidad autónoma durante el periodo. Este instrumento, ahora en fase de renegociación, ha hecho que los recursos administrados por las instituciones vascas se multiplicaran entre 1982 y 1998 por once, mientras que los presupuestos generales del Estado lo hicieron por ocho.
La recaudación fiscal por los tributos concertados en virtud del Concierto Económico presenta unos ingresos anuales per cápita de 585.388 pesetas en Euskadi, mientras que la recaudación media per cápita en el resto de España se sitúa en 410.220 pesetas. Esta mayor recaudación per cápita se produce tanto en los impuestos directos como indirectos.
El informe constata cómo la contribución del sector público vasco al crecimiento económico 'puede calificarse de positiva' y que el 'establecimiento del Concierto Económico ha constituido un factor determinante en las posibilidades de actuación de dicho sector público vasco'. Una de las principales manifestaciones prácticas es la recaudación fiscal, competencia correspondiente a las diputaciones y que en el año 2000 proporcionó unos ingresos de 1,3 billones de pesetas, cifra que multiplica por nueve los ingresos de 1982. El destino de estos recursos ha ido cambiando, ya que mientras inicialmente el 36% de la recaudación tenía por objeto hacer frente al pago del cupo al Estado, este porcentaje se ha ido reduciendo a medida que se produjeron las diversas transferencias, hasta quedarse en un 11% en 2000.
Por contra, las aportaciones al Gobierno vasco han pasado de ser el 36% de los ingresos por tributos a elevarse hasta el 62% en 2000. Esta mayor dotación de recursos para el Gobierno autónomo responde a que partidas como Educación y Sanidad supusieron un gasto conjunto de más de 400.000 millones.