Dimisión en la Mancomunidad de la Ribera para cumplir el pacto de izquierdas

El presidente de la Mancomunidad de la Ribera Alta, el socialista Francesc Signes, presentó ayer su dimisión en la sede comarcal de Alzira para propiciar el acceso a la presidencia de la actual vicepresidenta, Matilde Ferrá (Bloc), en virtud del pacto de izquierdas que firmaron al principio de la legislatura el PSPV, EU y los nacionalistas. Pero el relevo no será una tarea fácil porque el PP, que es la fuerza mayoritaria con 33 representantes, pretende evitar que se le escape el gobierno de esta mancomunidad. Ante el equilibrio existente, el grupo más apetecido tanto por el bloque de la derech...

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El presidente de la Mancomunidad de la Ribera Alta, el socialista Francesc Signes, presentó ayer su dimisión en la sede comarcal de Alzira para propiciar el acceso a la presidencia de la actual vicepresidenta, Matilde Ferrá (Bloc), en virtud del pacto de izquierdas que firmaron al principio de la legislatura el PSPV, EU y los nacionalistas. Pero el relevo no será una tarea fácil porque el PP, que es la fuerza mayoritaria con 33 representantes, pretende evitar que se le escape el gobierno de esta mancomunidad. Ante el equilibrio existente, el grupo más apetecido tanto por el bloque de la derecha como por el de la izquierda es Unión Valenciana, cuyos ocho miembros tienen la llave del futuro gobierno comarcal. A pesar de su escaso presupuesto, poco más de 100 millones de pesetas entre los 34 municipios que la componen, la mancomunidad ha desarrollado una gran actividad y logrado importantes ayudas de la Unión Europea como la Agencia Energética de la Ribera y el proyecto Equal destinado a la creación de empleo, entre otros.-

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