Gastos 'desorbitados'

Miembros del consejo de administración de Terra Mítica no han ocultado durante los últimos meses su malestar por los 'excesivos' y en algún caso 'desorbitados' gastos suntuarios del parque temático, algunos de ellos achacables directamente al ya ex director general Miguel Navarro. En los últimos meses el consejo forzó la elaboración de un plan para reducir los gastos, truncado ahora con la entrada de Paramount Parks en la gestión del complejo de ocio, que diseñará una nueva política de inversión de sus activos.

Lo que sí ha cultivado Miguel Navarro es la opacidad en la gestión y en su p...

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Miembros del consejo de administración de Terra Mítica no han ocultado durante los últimos meses su malestar por los 'excesivos' y en algún caso 'desorbitados' gastos suntuarios del parque temático, algunos de ellos achacables directamente al ya ex director general Miguel Navarro. En los últimos meses el consejo forzó la elaboración de un plan para reducir los gastos, truncado ahora con la entrada de Paramount Parks en la gestión del complejo de ocio, que diseñará una nueva política de inversión de sus activos.

Lo que sí ha cultivado Miguel Navarro es la opacidad en la gestión y en su política informativa. Cuando las cuentas del parque no han ido bien -casi siempre-, Navarro ha justificado su silencio con apelaciones al carácter privado del parque. Pero a la hora de pedir préstamos y avales Terra Mítica ha derrochado su condición pública. Público o privado el parque, la gestión de Navarro -también es apoderado de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia- sólo fue translúcida al inicio, cuando Terra Mítica aún no había abierto sus puertas. Luego, coincidiendo con la progresión de las pérdidas, se oscureció. Ni siquiera ayer, en la coferencia de prensa de su despedida del parque, dio opción a preguntas.

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