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Palpar, mirar y girar

Los expertos comunitarios aconsejan palpar, mirar y girar los billetes del euro que pronto se distribuirán para así comprobar la autenticidad de la moneda europea. Precisamente, ahora que comienza el nuevo curso, no vendría mal a las distintas fuerzas políticas recurrir a este método casero para determinar hasta qué punto va en serio ese propósito de Manuel Chaves de poner en marcha la segunda modernización de Andalucía, con la reforma del Estatuto de Autonomía, si así se tercia.

Tras lanzar el presidente andaluz la idea, el debate abierto provocó inicialmente una cierta precipitación d...

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Los expertos comunitarios aconsejan palpar, mirar y girar los billetes del euro que pronto se distribuirán para así comprobar la autenticidad de la moneda europea. Precisamente, ahora que comienza el nuevo curso, no vendría mal a las distintas fuerzas políticas recurrir a este método casero para determinar hasta qué punto va en serio ese propósito de Manuel Chaves de poner en marcha la segunda modernización de Andalucía, con la reforma del Estatuto de Autonomía, si así se tercia.

Tras lanzar el presidente andaluz la idea, el debate abierto provocó inicialmente una cierta precipitación del PP andaluz, que resultó ser el primero en arrojarse a la piscina, ofreciendo propuestas, demostrando así algo de bisoñés política, máxime cuando el promotor de este proceso, el PSOE, aún no había enseñado sus cartas. Finalmente, los populares rectificaron y han confiado la fijación de una posición respecto a este complejo asunto a lo que dé de sí, entre otras cosas, la próxima celebración de un seminario con catedráticos de Derecho y otros expertos en la materia. En cualquier caso, a nadie se le escapa que este desafío encierra notables riesgos, tanto para el PSOE como para el PP, formación esta última que puede verse incluso atrapada, por ejemplo, en una posible reclamación de un nuevo marco competencial, o completar las transferencias recogidas en el actual Estatuto, reivindicaciones que corresponde resolver al Gobierno central.

Por medio quedará el fuego graneado que proporcionarán éstos, junto con Izquierda Unida, bajo los designios de su coordinador general, Antonio Romero, con las manos más libres ahora para concertar actuaciones con la derecha, después de lo que ocurrirá en el País Vasco, y con un singular grupo mixto de Pedro Pacheco, surgido con la vocación de convertirse en la verdadera china del zapato del Ejecutivo andaluz.

Además, ha de completarse la renovación de los órganos de gobierno de las cajas sevillanas, para luego llevar a cabo su fusión, según el compromiso adquirido. Pero, sobre todo, será el tiempo en el que de una vez por todas tendrán que ponerse cifras completas al nuevo sistema de financiación autonómica, para, en definitiva, conocer cuánto dinero le corresponderá a Andalucía.

Si nos atenemos al anuncio estival de los dirigentes populares advirtiendo que desplegarán toda una ofensiva política en este otoño en la comunidades que no gobiernan, como ocurre con Andalucía, o a los proyectos de IU con la vista puesta en las elecciones municipales como punto de partida para su recuperación, de la mano de Gaspar Llamazares, así como la entrada en escena del Partido Socialista de Andalucía, auspiciado por el alcalde jerezano, o la táctica del PA para agudizar las diferencias con sus socios de gobierno, está claro que nos encontramos ante una de las etapas más intensas y decisivas de esta legislatura.

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