Ocho años de cárcel para un hombre que violó a su mujer tras decirle ésta que le iba a abandonar
La Audiencia de Madrid ha condenado a ocho años de cárcel a David A. S., de 32 años, por violar a su compañera sentimental tras anunciarle ésta su intención de separarse.
La sentencia declara probado que David llegó el pasado 1 de junio a la casa que compartía con la víctima y los dos hijos de ambos, de ocho y nueve años. Tras una fuerte discusión en el salón de la vivienda, la víctima comunicó a David su intención de abandonarle. La reacción del hombre fue amenazar a la víctima con matarla. 'Y no me importa ir a la cárcel', le soltó, antes de advertirle: 'Te voy a hacer aquello que tan...
La Audiencia de Madrid ha condenado a ocho años de cárcel a David A. S., de 32 años, por violar a su compañera sentimental tras anunciarle ésta su intención de separarse.
La sentencia declara probado que David llegó el pasado 1 de junio a la casa que compartía con la víctima y los dos hijos de ambos, de ocho y nueve años. Tras una fuerte discusión en el salón de la vivienda, la víctima comunicó a David su intención de abandonarle. La reacción del hombre fue amenazar a la víctima con matarla. 'Y no me importa ir a la cárcel', le soltó, antes de advertirle: 'Te voy a hacer aquello que tantas veces te he anunciado'. Acto seguido, según los jueces, la empujó sobre un sillón, le tapó la boca y la dejó inmovilizada. Luego la violó vaginal y analmente, sin importarle 'los sollozos' de la víctima.
La mujer contó en el juicio que, tras quedarse dormido su compañero, aprovechó para huir. Se refugió en la casa de su hermana y su cuñado, a quienes relató lo ocurrido. Éstos avisaron a la policía. Antes de tomar su denuncia, los agentes la llevaron al hospital La Paz, dado el estado de ansiedad que presentaba la mujer. Más tarde, ella pidió ayuda a la Asociación de Asistencia a Mujeres Violadas. A consecuencia de la agresión, la víctima sufrió 'lesiones consistentes en erosiones perianales con dos fisuras en el esfínter' y lesiones en la vagina.
Un informe psicológico sobre la víctima revela que, durante su convivencia con el procesado, sufrió 'alteraciones compatibles con malos tratos y violencia sexual'. La sentencia recoge que la víctima padecía trastornos en la alimentación y el sueño, ansiedad y un bajo nivel de autoestima. La Audiencia halla ilógico en la sentencia el argumento de la defensa según el cual ella se puso 'cariñosa' con su compañero y aceptó tener relaciones sexuales con él 'consentidas y satisfactorias' tras haberle dicho que iba a iniciar los trámites de separación al día siguiente.
La abogada de la víctima, Carmen Roney, pidió en el juicio 10 años de cárcel para el procesado. En la sentencia, los jueces prohíben al reo acercarse a la mujer durante dos años.