El fascismo y la antiglobalización
El señor Ramón de Miguel, secretario de Estado de Asuntos Europeos, afirma hoy en EL PAÍS, con motivo de lo ocurrido en Génova el fin de semana pasado, que 'las actuaciones de los movimientos antiglobalización constituyen un triste espectáculo de fascismo'. Como participante invitado al Foro Social de Génova, tengo que protestar por estas declaraciones y condenar la opinión del señor De Miguel. La obligación de este señor era denunciar al Gobierno de Italia, y en concreto a sus fuerzas del orden, por los ataques a los manifestantes españoles, así como al resto de manifestantes pacíficos antigl...
El señor Ramón de Miguel, secretario de Estado de Asuntos Europeos, afirma hoy en EL PAÍS, con motivo de lo ocurrido en Génova el fin de semana pasado, que 'las actuaciones de los movimientos antiglobalización constituyen un triste espectáculo de fascismo'. Como participante invitado al Foro Social de Génova, tengo que protestar por estas declaraciones y condenar la opinión del señor De Miguel. La obligación de este señor era denunciar al Gobierno de Italia, y en concreto a sus fuerzas del orden, por los ataques a los manifestantes españoles, así como al resto de manifestantes pacíficos antiglobalización.
La actuación de estas fuerzas sí que fue al 'estilo fascista' en todos los sentidos, violando los derechos humanos, desencadenando la violencia y, lo peor de todo, no garantizando ni protegiendo el derecho del Foro Social de Génova a desarrollar sus actividades paralelas a las del G-8. El que sospechosos grupos violentos vengan coincidiendo con las convocatorias pacíficas del movimiento antiglobalización capitalista para desvirtuar sus contenidos debe mover a profunda reflexión.
El Gobierno español ha de garantizar y respetar el que con las cumbres que se celebren en nuestro país puedan tener lugar las reuniones alternativas, pacíficas, y no se suspenda, como lo ha hecho arbitrariamente Italia, la libre circulación de ciudadanos europeos. Por lo que pueda pasar, vamos a denunciar esta conducta italiana en el Parlamento Europeo y a solicitar la creación de una comisión ad hoc para investigar estos hechos.-