Interceptado un velero en alta mar con 500 kilos de cocaína escondidos en la proa
Los agentes aduaneros españoles interceptaron el pasado jueves al velero Aruba en alta mar, en aguas internacionales a la altura del cabo San Vicente, y encontraron en su interior 500 kilos de cocaína. Los agentes participaban en una operación contra el narcotráfico internacional, que aún permanece abierta, y en la que este velero aparecía como sospechoso. Los dos ciudadanos estadounidenses que tripulaban el barco fueron detenidos inmediatamente y posteriormente trasladados a la Audiencia Nacional, en Madrid.
Tras el abordaje, las detenciones y el hallazgo de la media tonelada de...
Los agentes aduaneros españoles interceptaron el pasado jueves al velero Aruba en alta mar, en aguas internacionales a la altura del cabo San Vicente, y encontraron en su interior 500 kilos de cocaína. Los agentes participaban en una operación contra el narcotráfico internacional, que aún permanece abierta, y en la que este velero aparecía como sospechoso. Los dos ciudadanos estadounidenses que tripulaban el barco fueron detenidos inmediatamente y posteriormente trasladados a la Audiencia Nacional, en Madrid.
Tras el abordaje, las detenciones y el hallazgo de la media tonelada de cocaína de gran pureza -se calcula que, tras ser cortada según la calidad que se maneja en la venta al menudeo, podría convertirse en unos tres millones de dosis de un gramo-, un remolcador oceánico de los servicios aduaneros españoles trasladó el velero con matrícula de Hamburgo hasta el puerto de Cádiz. Posteriormente, la nave fue remolcada hasta Puerto América, donde comenzaría una inspección más exhaustiva por si aún hubiera más droga camuflada en su interior.
En el dique seco de Puerto América, los aduaneros españoles perforaron ayer el casco del velero de 16 metros de eslora para detectar posibles depósitos camuflados. Por el momento, las autoridades no han informado del hallazgo de más cocaína que los 500 kilos descubiertos en primer lugar en la zona de la proa de la nave.
Tampoco se han hecho públicas las identidades de los detenidos, pues la investigación sigue abierta y se intenta descubrir posibles ramificaciones internacionales. Las policías de los distintos países deben unir fuerzas contra el narcotráfico y en operaciones a múltiples bandas siguen la droga desde su carga hasta que llega a su destino, normalmente tras pasar por aguas y territorios de varios países.