Récord de españoles, 32, a orillas del Sena
Enfrentarse a un tenista español siempre suscita temor en Roland Garros. El único torneo del Grand Slam que se disputa sobre tierra batida se pone hoy en marcha con más posibilidades que nunca de que eso ocurra: la representación nacional es la más amplia de la historia: 32 participantes -el récord anterior era de 28, en 1998-, 18 hombres y 14 mujeres. Algunos de los candidatos al título van a sufrirlos desde las primeras rondas. Los hipotéticos partidos de la segunda entre Carlos Moyà y el sueco Magnus Norman, ex campeón y ex finalista respectivamente; Albert Costa y el estadounidense Andre A...
Enfrentarse a un tenista español siempre suscita temor en Roland Garros. El único torneo del Grand Slam que se disputa sobre tierra batida se pone hoy en marcha con más posibilidades que nunca de que eso ocurra: la representación nacional es la más amplia de la historia: 32 participantes -el récord anterior era de 28, en 1998-, 18 hombres y 14 mujeres. Algunos de los candidatos al título van a sufrirlos desde las primeras rondas. Los hipotéticos partidos de la segunda entre Carlos Moyà y el sueco Magnus Norman, ex campeón y ex finalista respectivamente; Albert Costa y el estadounidense Andre Agassi, Galo Blanco y el también norteamericano Pete Sampras, Àlex Corretja y Fernando Vicente o el ruso Marat Safin y el ganador de la cita Àlex Calatrava-Pato Clavet pueden condicionar el futuro de la competición. La fragilidad de Agassi y Sampras o la de Norman, que apenas han jugado en tierra batida, será puesta a prueba. Y todos pueden salir tocados ante los españoles.
La cuestión en Roland Garros es tener una buena mentalidad, estar dispuesto a sufrir, mantener la frescura mental a pesar de que el partido se alargue tres horas y las alternativas vayan cambiando. A París hay que llegar bregado. Y tanto los españoles como los suramericanos lo están, porque son quienes más partidos disputan en superficies lentas. Ellos actúan de auténtico termómetro para los demás. Agassi tendrá ocasión de descubrir su estado real cuando se enfrente a un Costa que ha recuperado su forma y está en un gran momento. Y lo mismo le ocurrirá a Sampras ante Blanco o a Safin, que no ha estado bien durante todo el año.
Los candidatos al título son pocos. El brasileño Gustavo Kuerten y Juan Carlos Ferrero lideran el grupo, en el que también se integran Àlex Corretja, Moyà, Agassi, el australiano Lleyton Hewitt, Safin y el también ruso Yevgeny Kafelnikov. La revelación estadounidense, Andy Roddick, de 18 años, es una incógnita a pesar de que ha ganado los diez partidos que ha disputado en la tierra batida de su país. Según la lógica, los números, las semifinales enfrentarían a Kuerten (primer cabeza de serie) con Ferrero (cuarto) y a Safin (segundo) con Agassi (tercero).
Davenport, cuarta baja
En el cuadro femenino se confirmó ayer la baja de la estadounidense Lindsay Davenport, la tercera cabeza de serie, por una lesión en su rodilla derecha. Su baja se añade a las de la francesa Mary Pierce, campeona vigente; la estadounidense de origen serbio Mónica Seles y la rusa Anna Kournikova.
La suiza Martina Hingis y la norteamericana Venus Williams son las dos primeras cabezas de serie. Arantxa Sánchez, la única que ha ganado el torneo, debería enfrentarse en los octavos de final a la estadounidense Serena Williams, a la también norteamericana Jennifer Capriati en los cuartos y a Hingis en las semifinales. Conchita Martínez, finalista en 2000, chocaría con la surafricana Amanda Coetzer en los octavos y Hingis en los cuartos.