Estalla un artefacto casero en la vivienda de una concejal de UPN en Villava
Elena Murillo, concejal de Unión del Pueblo Navarro (UPN) en Villava, pueblo próximo a Pamplona, en cuya vivienda explotó en la madrugada de ayer un artefacto casero que causó daños materiales, no alberga dudas. Elena Murillo tiene muy claro que los autores del atentado son personas que viven en su mismo pueblo: 'Sin duda', afirmó ayer antes de asegurar que no tiene intención de dimitir. 'Ellos saben lo que hago y por eso lo han hecho, no tengo la menor duda. Como tampoco tengo duda de que son gente de esta misma localidad, de esas que te ven por la calle y te miran con cara de odio'.
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Elena Murillo, concejal de Unión del Pueblo Navarro (UPN) en Villava, pueblo próximo a Pamplona, en cuya vivienda explotó en la madrugada de ayer un artefacto casero que causó daños materiales, no alberga dudas. Elena Murillo tiene muy claro que los autores del atentado son personas que viven en su mismo pueblo: 'Sin duda', afirmó ayer antes de asegurar que no tiene intención de dimitir. 'Ellos saben lo que hago y por eso lo han hecho, no tengo la menor duda. Como tampoco tengo duda de que son gente de esta misma localidad, de esas que te ven por la calle y te miran con cara de odio'.
A las 02.40 de ayer un artefacto de fabricación casera compuesto por un petardo de gran tamaño, dos bombonas de cámping gas y una garrafa de cinco litros de gasolina estalló en el rellano del segundo piso del número nueve de la calle de Esteban Armendáriz. Las puertas de las tres viviendas de este rellano resultaron dañadas, el techo sufrió desconchados y las paredes quedaron ennegrecidas. Ninguna persona resultó herida por el estallido.
'Ahora ya estoy tranquila y serena pero mi mayor preocupación ha sido una sobrina de 13 años que esta noche [por la madrugada de ayer] la pasaba en mi casa. La puerta de la vivienda es blindada, pero aun así las llamaradas y el humo me han hecho sobre todo temer por ella'. La edil aseguró que una de las bombonas de cámping gas no llegó a estallar y añadió que su marido, un policía local de Barañain, colocó trapos mojados en las ranuras de la puerta y abrió las ventanas nada más producirse la explosión.
Murillo subrayó que no tiene intención de abandonar su cargo. 'La puerta se cambiará, la escalera se remodelará y si lo que pretendían era meterme miedo, aunque con él ya vivimos todos y éste es un episodio más del día a día, no lo han conseguido y ni me planteo hoy por hoy el dimitir'.
El secretario general de UPN, Alberto Catalán, destacó que el ataque es 'un atentado directo y dirigido a todos los habitantes de Villava'.