Crítica:CRÍTICA | TEATRO

La destrucción o el amor

Las amistades peligrosas

De Christopher Hampton, en versión de Mercedes Abad. Intérpretes, Tnoi Cantó, Amparo Larrañaga, Maribel Verdú, Carmen Bernardos... Vestuario y escenografía, Gerardo Trotti. Dirección, Ernesto Caballero. Teatro Olympia. Valencia

La famosa novela epistolar de Choderlos de Laclos ha sido llevada al cine numerosas veces (a manos de Stephen Frears y Milos Forman las más recientes) y también ha conocido diversas versiones para el teatro, ésta de Christopher Hampton entre ellas. Es un texto que, más que de las virtudes del libertinaje, habla a su manera d...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Las amistades peligrosas

De Christopher Hampton, en versión de Mercedes Abad. Intérpretes, Tnoi Cantó, Amparo Larrañaga, Maribel Verdú, Carmen Bernardos... Vestuario y escenografía, Gerardo Trotti. Dirección, Ernesto Caballero. Teatro Olympia. Valencia

La famosa novela epistolar de Choderlos de Laclos ha sido llevada al cine numerosas veces (a manos de Stephen Frears y Milos Forman las más recientes) y también ha conocido diversas versiones para el teatro, ésta de Christopher Hampton entre ellas. Es un texto que, más que de las virtudes del libertinaje, habla a su manera de la banalidad del mal, aunque siendo una maquiavélica dama la instigadora de los acontecimientos, se ha dado en suponer que integraba a su manera una especie de feminismo anticipado a su eclosión en el siglo recién terminado.

El lastimoso triángulo que forman una dama intrigante y desocupada, su antojadizo amante y una virtuosa recién casada, y la apuesta que habrá de destruirlos, habla también del carácter manipulador de las pasiones cuando se someten a los dictados del juego, un juego en el que Valmont perderá los papeles al enamorarse de su joven víctima y medio arrepentirse de lo hecho, lo que, de paso, destruirá también a la dama que inició la apuesta.

Historia sórdida donde el amor queda muchas veces subordinado a la ambición, y en la que, en sus papeles principales, Amparo Larrañaga se desenvuelve con acierto en su malvado y al final desnortado personaje mientras que Toni Cantó se confirma como el buen actor que lleva dentro, en una interpretación llena de giros sutiles, y Maribel Verdú se esfuerza por componer el tipo de enamorada virtuosa. El dramaturgo Ernesto Caballero dirige con corrección una obra que, según como se monte, tampoco requiere de grandes alardes de dirección, ya que puede bastar con dejar fluir el conflicto. Muy buena la versión de Mercedes Abad.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En