Vila-real celebra la 'Palermomanía'

'Mi hermana, que vive en Londres, me ha dicho que me ha visto más en una semana por la CNN que en persona en los últimos años'. Fernando Roig, empresario azulejero de 53 años, ha sido engullido por los medios de comunicación desde que la semana pasada se atreviera a fichar al delantero del Boca Juniors Martín Palermo. Desde que Roig compró el 60% del Villarreal por 60 millones de pesetas -en mayo de 1997-, hasta que este equipo fichó la semana pasada a Palermo, el club ha experimentado una transformación espectacular. Entonces, en 1997, el Villarreal, presidido por Pascual Font de Mora, tenía ...

'Mi hermana, que vive en Londres, me ha dicho que me ha visto más en una semana por la CNN que en persona en los últimos años'. Fernando Roig, empresario azulejero de 53 años, ha sido engullido por los medios de comunicación desde que la semana pasada se atreviera a fichar al delantero del Boca Juniors Martín Palermo. Desde que Roig compró el 60% del Villarreal por 60 millones de pesetas -en mayo de 1997-, hasta que este equipo fichó la semana pasada a Palermo, el club ha experimentado una transformación espectacular. Entonces, en 1997, el Villarreal, presidido por Pascual Font de Mora, tenía un presupuesto de 310 millones y una estructura casi rural: los jugadores se reunían en un bar de la población, de 40.000 habitantes, para cobrar. Hoy, el club castellonense presenta un presupuesto de 4.000 millones y seguirá creciendo hasta 'que empiece a dar frutos la cantera'. Contrastan, a su vez, los 3.800 socios de entonces con los 15.500 de ahora, antes de llegar Palermo.

El Villarreal pagará por la mitad de Palermo 1.300 millones de pesetas. Durante dos ejercicios, el jugador tendrá una cláusula de rescisión de 6.000 millones de pesetas, pero, cumplido ese plazo, cualquier club podrá negociar con el Boca y el Villarreal la adquisición de Palermo. Ahora bien, el club castellonense dispone de un plazo de 90 días para decidir si le paga al Boca el otro 50% del delantero. La operación de Palermo incluye la marcha de Gaitán al Boca, compartiendo ambas entidades el 50%. Otro trueque: Marioni, del Villarreal al Boca, y Gustavo Barros Schelotto, del Boca al Villarreal.

Los ejes de la modernización del Villarreal han sido básicamente tres: la ciudad deportiva, el estadio y los fichajes. El club ha invertido 1.500 millones en una ciudad deportiva de 70.000 metros cuadrados: cinco campos de fútbol y una residencia para los jóvenes. El director de esta escuela es Alejandro López Ufarte, ex futbolista y hermano del ex extremo zurdo de la Real Roberto López Ufarte. La elección de Alejandro, al igual que la de Víctor Muñoz como técnico del primer equipo, es una declaración de intenciones: entrenadores jóvenes, ambiciosos y amantes del espectáculo.

El estadio de El Madrigal, de propiedad municipal, ha pasado de una capacidad de 3.000 localidades a las actuales 17.000, que el club pretende convertir en 21.000. Roig ha adelantado el dinero de la ampliación -2.400 millones-, que le será devuelto en un plazo de 10 años por el Ayuntamiento y la Generalitat.

La primera estrella en llegar fue el capitán de Boca Juniors Diego Cagna, que arribó en diciembre de 1999 para hacer que un equipo que navegaba en mitad de la tabla alcanzara el ascenso a Primera. El Villarreal pagó 600 millones por el 80% del pase, una práctica -la de comprar jugadores por porciones- muy común en Argentina. ¿Pero cómo?, ¿el capitán del Boca en Segunda? Cuestión de plata. Cagna pasó de cobrar 80 millones brutos en Argentina a 120 limpios en Vila-real. Algo parecido le sucedió al lateral izquierdo Arruabarrena, que costó 700 millones por el 80%. O similar a Víctor, procedente del Valladolid y por quien el Villarreal abonó 1.200 millones.

'Lo de Palermo ha sido estar allí en el momento justo', dice Roig para explicar la sorprendente operación. Falló el Nápoles y ahí estaba, al quite, el Villarreal, que curiosamente no dispone de un secretario técnico. Hay un grupo de técnicos, entre ellos el ex jugador y ex preparador Paquito y el propio hijo de Roig, de 26 años, pero siempre prevalece la opinión del presidente, que fichó personalmente a una de las revelaciones de la temporada: el interior Jorge López. Otras adquisiones interesantes son las del central Unai (300 millones al Mérida), Amor (gratis del Fiorentina) y Calleja (gratis del Alcalá). ¿Hobby o negocio? 'Todos los beneficios se reinvertirán en el club', dice el presidente, ansioso de que se termine, en el 2003, el actual contrato con las televisiones por los derechos de los partidos: ahora el Villarreal percibe algo más de 1.000 millones, pero con Palermo estos ingresos aumentarán.

Autobuses gratuitos

Otro tanto quiere Roig respecto a Kelme, la empresa que viste al equipo y que le paga 40 millones por año. Ya han llegado de Argentina 2.000 peticiones de camisetas de Palermo, mientras 10 autobuses saldrán el miércoles de Castellón hacia el aeropuerto de Manises (Valencia) para recibir al nuevo ídolo. La afición celebra la Palermomanía con pancartas ingeniosas ('Guti, dijiste paletos o Palermo') en alusión a unos insultos del madridista a la hinchada amarilla; y el presidente Roig se convierte en cronista eventual de la corte de Vila-real, ante las preguntas de más de 30 periodistas argentinos que le llamaron nada más conocerse el destino de Palermo.