Los nacionalistas ven 'inviable' el crecimiento de los pueblos de Vitoria
El Plan General de Vitoria, aprobado por la Diputación en la última semana de diciembre, es una fuente inagotable de polémica. Al anuncio del Gobierno vasco de que piensa paralizar como sea una parte del documento, se unió ayer la crítica del grupo nacionalista en el Ayuntamiento. Sus portavoces interpretan que la Diputación ha 'metido en un lío' al equipo de gobierno municipal de tal calibre que hace 'inviable' cualquier intento de expansión por los pueblos situados en los alrededores de la ciudad, pese a que el Ayuntamiento quería construir más de 6.000 chalés.
La clave radica en una...
El Plan General de Vitoria, aprobado por la Diputación en la última semana de diciembre, es una fuente inagotable de polémica. Al anuncio del Gobierno vasco de que piensa paralizar como sea una parte del documento, se unió ayer la crítica del grupo nacionalista en el Ayuntamiento. Sus portavoces interpretan que la Diputación ha 'metido en un lío' al equipo de gobierno municipal de tal calibre que hace 'inviable' cualquier intento de expansión por los pueblos situados en los alrededores de la ciudad, pese a que el Ayuntamiento quería construir más de 6.000 chalés.
La clave radica en una cuestión semántica: la Diputación ha cambiado la clasificación de todos los terrenos que el Ayuntamiento consideraba 'urbanos' por 'urbanizables'. Ello implica mayores cargas económicas a los dueños de los terrenos (64 pueblos pertenecen al municipio de Vitoria) y obliga al Ayuntamiento a construir un mínimo del 65% de viviendas protegidas.
El portavoz de EA, Avelino Fernández de Quincoces, cree que incluso se requiere 'una nueva tramitación del Plan' debido al calado de los cambios introducidos por el Gobierno foral. Todo eso conllevaría casi un año de retraso, es decir, que 'el decreto de la Diputación desmonta el Plan del Ayuntamiento'. 'Y, pese a todo, el alcalde dice que está muy contento', añadió. Los nacionalistas han pedido que el primer edil, Alfonso Alonso, aclare su postura ante el decreto aprobado por sus compañeros del PP en la Diputación.