Atentado fallido de ETA en Zarautz contra la cúpula del PP vasco

Según la policía autónoma vasca, un fallo en el mando a distancia que debía activar la bomba impidió que ésta alcanzara de lleno a los asistentes a la ceremonia que se celebró ayer, al mediodía, en el cementerio de Zarautz.

Ocho horas más tarde, la Ertzaintza procedió a la explosión controlada del artefacto, tras una prolongada búsqueda del mismo a raíz de diversas llamadas telefónicas a lo largo de la tarde, en las que ETA se responsabilizó de su colocación. Junto a Iturgaiz y otros cargos públicos del PP acudieron al acto la presidenta del partido en Guipúzcoa, María San Gil, y la sec...

Según la policía autónoma vasca, un fallo en el mando a distancia que debía activar la bomba impidió que ésta alcanzara de lleno a los asistentes a la ceremonia que se celebró ayer, al mediodía, en el cementerio de Zarautz.

Ocho horas más tarde, la Ertzaintza procedió a la explosión controlada del artefacto, tras una prolongada búsqueda del mismo a raíz de diversas llamadas telefónicas a lo largo de la tarde, en las que ETA se responsabilizó de su colocación. Junto a Iturgaiz y otros cargos públicos del PP acudieron al acto la presidenta del partido en Guipúzcoa, María San Gil, y la secretaria general en dicha provincia, María José Usandizaga, además del padre del concejal asesinado, su hermana y otros familiares.

El Cuerpo Nacional de Policía localizó ayer, en una nave de un polígono industrial de Irún (Guipúzcoa), el zulo en el que estuvieron secuestrados el industrial José María Aldaya (341 días) y el abogado Cosme Delclaux (siete meses y medio). La operación fue posible gracias a la información dada por el presunto miembro de ETA y copropietario del local, Francisco José Ramada, entregado el lunes por México.