Investigan al padre de las Williams por presunta agresión a su esposa

Richard Williams, padre de las tenistas Venus y Serena, vuelve a estar en el candelero y esta vez no precisamente por los éxitos deportivos de sus dos hijas. La policía de Florida dio a conocer ayer unos informes en los que se investigaban las agresiones físicas sufridas por Oracene Williams, madre de las dos jugadoras, entre 1997 y 1999, con resultado de varias costillas rotas. La Policía Local de West Palm Beach recibió en aquel periodo dos llamadas procedentes de la residencia de los Williams denunciando los incidentes.Las pesquisas policiales se dirigieron hacia la hipotética acusación de ...

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Richard Williams, padre de las tenistas Venus y Serena, vuelve a estar en el candelero y esta vez no precisamente por los éxitos deportivos de sus dos hijas. La policía de Florida dio a conocer ayer unos informes en los que se investigaban las agresiones físicas sufridas por Oracene Williams, madre de las dos jugadoras, entre 1997 y 1999, con resultado de varias costillas rotas. La Policía Local de West Palm Beach recibió en aquel periodo dos llamadas procedentes de la residencia de los Williams denunciando los incidentes.Las pesquisas policiales se dirigieron hacia la hipotética acusación de violencia doméstica por parte del esposo, Richard. Oracene, de 48 años, dijo entonces a los inspectores de policía que la visitaron en el Columbia Medical Center, donde fue ingresada, que no podía revelar el nombre de la persona que la lesionó. "Yo sé que ustedes saben lo que sucedió, pero siento miedo por las carreras de mis hijas", dijo a los investigadores el 17 de febrero de 1999, según queda establecido en el informe del sheriff.

Richard Williams, de 58 años, declaró el pasado viernes que cuando su esposa se lesionó, "con una puerta", él se encontraba en Chicago. Sin embargo, la afirmación de Richard queda en entredicho. En el informe se especifica que un agente de la policía fue llamado al hospital por el doctor que atendió a Oracene Williams después de que ésta admitiera que las lesiones que sufría no se las había hecho con una puerta, sino que alguien la había lastimado. El agente que se entrevistó con Oracene escribió en el informe su sospecha de que ella pudo haber sido asaltada y agredida por su esposo o por otro miembro de la familia.

Venus, en silencio

La declaración de Oracene se produjo ante sus dos hijas, Venus y Serena, que la habían acompañado al hospital. Serena, la menor, de 19 años, indicó que si alguien hubiera agredido a su madre no tendría ningún problema en denunciarlo. En cambio, Venus se mostró más determinada y se limitó a expresar el deseo de su madre de no hacer comentarios al respecto. Permaneció en silencio.Anteriormente, en 1997, los agentes de policía también fueron llamados por Oracene para investigar otra disputa familiar. Pero cuando los agentes llegaron a su casa, les comunicó que había sido algo sin importancia y que ya estaba resuelto. La explicación de Richard, aquella vez, fue verosímil: "Ella se asustó cuando me vio jugando con un arma de perdigones y pensó que iba a dispararme a mí mismo". En ambos casos, los agentes de policía recogieron materiales en la residencia de los Williams, como medida preventiva para poder preservar los derechos establecidos para las víctimas de la violencia doméstica.

Venus y Serena optaron ya a principios de este año por construirse una casa muy cerca de la de sus padres, y trasladar allí su residencia. "Nos sentimos más independientes", señalaron ambas. Su padre no se opuso a esta decisión.

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