Lopera: "Olivera parecía un banderillero en una corrida"

Sin estridencias, siguiendo el guión que él mismo se encargó de confeccionar junto con su homólogo del Sevilla, Roberto Alés, compareció Manuel Ruiz de Lopera, el presidente del Betis, tras el varapalo que ayer recibió de su vecino el Sevilla. Eso sí, pese a la concordia y buenas intenciones que han marcado este derby, Lopera no pudo evitar soltar algún que otro puyazo refiriéndose a aspectos puntuales del partido.Así ocurrió cuando se le preguntó acerca de la actitud del uruguayo Olivera al pasearse por medio campo con el palo que le fue arrojado desde la grada. "Han tirado un palo de ...

Sin estridencias, siguiendo el guión que él mismo se encargó de confeccionar junto con su homólogo del Sevilla, Roberto Alés, compareció Manuel Ruiz de Lopera, el presidente del Betis, tras el varapalo que ayer recibió de su vecino el Sevilla. Eso sí, pese a la concordia y buenas intenciones que han marcado este derby, Lopera no pudo evitar soltar algún que otro puyazo refiriéndose a aspectos puntuales del partido.Así ocurrió cuando se le preguntó acerca de la actitud del uruguayo Olivera al pasearse por medio campo con el palo que le fue arrojado desde la grada. "Han tirado un palo de plástico de una bandera, pero no ha caído dentro del terreno de juego. El jugador no debería haberlo hecho, pero lo ha cogido y se ha paseado con él por todo el campo. Parecía un banderillero o un picador y el partido una corrida de toros, pero son cosas que pasan", relataba Lopera, quien no dudó en felicitar al Sevilla por su victoria.

Igual de conciliador se mostró Alés, quien también se refirió al incidente del palo: "Me habría gustado más que Olivera tirara el palo fuera, pero fue algo que tuvo una repercusión mínima y espero que el Betis no tenga por eso ninguna sanción".

Menos comprensivo se mostró Fernando Vázquez, el técnico del Betis, que tuvo sus más y sus menos con el delantero uruguayo durante el partido. Vázquez, que felicitó al jugador por su actuación y sus goles, recriminó a Olivera que tratase de calentar el ambiente cuando la consigna marcada era tratar de rebajar la tensión entre las aficiones.

Un propósito que se cumplió con creces. Ni un solo incidente se registró ni antes ni después del partido. El que ha venido llamándose derby de la concordia hizo honor a su nombre.