Los socialistas aceptan negociar que los etarras pasen hasta 30 años en prisión si no se arrepienten

Ni cadena perpetua ni incremento de la pena máxima actual, de 30 años de reclusión carcelaria. Pero podría estudiarse el cumplimiento íntegro en la cárcel de las penas de 30 años de reclusión cuando el condenado no muestre arrepentimiento o voluntad de reinserción social. Ésta es la posición del PSOE, que ayer expuso su portavoz parlamentario, Jesús Caldera, quien matizó que debe ser el Gobierno y no la oposición el que plantee reformas en ese terreno. No hay conversaciones con el Ejecutivo sobre nuevas medidas legislativas en torno al terrorismo, ya que todavía se está en plena discusión sobr...

Ni cadena perpetua ni incremento de la pena máxima actual, de 30 años de reclusión carcelaria. Pero podría estudiarse el cumplimiento íntegro en la cárcel de las penas de 30 años de reclusión cuando el condenado no muestre arrepentimiento o voluntad de reinserción social. Ésta es la posición del PSOE, que ayer expuso su portavoz parlamentario, Jesús Caldera, quien matizó que debe ser el Gobierno y no la oposición el que plantee reformas en ese terreno. No hay conversaciones con el Ejecutivo sobre nuevas medidas legislativas en torno al terrorismo, ya que todavía se está en plena discusión sobre las que presentó y que afectan al Código Penal y a la Ley del Menor. "No es aceptable que se utilicen las actuales modificaciones legislativas como percha para introducir cambios tan importantes como la ampliación de las penas, y ya no digamos sobre la cadena perpetua, que el PSOE no apoyará jamás", enfatizó Caldera. La pena de 30 años es "un máximo razonable" en tanto que la cadena perpetua "es inconstitucional", agregó el portavoz socialista para intentar zanjar el debate abierto sobre esas materias.

No obstante, hay margen, según los socialistas, para analizar la mejora en el cumplimiento de las penas mediante la vinculación del tiempo de estancia en la cárcel al arrepentimiento que muestre el condenado. "Causa alarma social y una gran repugnancia que un asesino con 15 o 20 crímenes a la espalda pueda volver a la calle, sin arrepentimiento, una vez cumplidos 16, 18 o 20 años de condena cuando el límite son 30 años. Eso es lo que el PSOE está dispuesto a estudiar si el Gobierno lo plantea", añadió Caldera.

El PSOE ha tenido que entrar en este debate, aunque no era su intención hacerlo, dado que la polémica sobre estos asuntos ha ido creciendo tras los últimos atentados. Así, el responsable de Libertades Públicas en su Ejecutiva, Juan Fernando López Aguilar, indicó a Europa Press que no ha tenido conversaciones con el Ejecutivo, en concreto con el ministro de Justicia, Ángel Acebes, sobre un incremento de las penas máximas.

El PSOE trabaja ahora en las enmiendas que va a presentar a las medidas enviadas por el Gobierno al Parlamento, que afectan al Código Penal y al tratamiento penitenciario de los jóvenes detenidos por delitos de terrorismo. "No nos parece sensato reabrir en canal el Código Penal ni la legislación de menores cada vez que ETA golpea, sino que hay que crear un marco firme, estable y todo lo duro que tenga que ser contra los terroristas para que, a partir de ahí, actúen las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", dijo López Aguilar, que pidió que no se "distraiga" a la opinión pública con debates falsos sobre el incremento de las penas, ya que lo que hay que hacer es "dar apoyo moral, político y presupuestario" a las fuerzas policiales.

El PSOE presentará una enmienda a las reformas propuestas por el Gobierno para que el internamiento de los jóvenes vinculados a ETA con edades comprendidas entre los 16 y los 18 años sea de un máximo de 5 a 8 años, dependiendo de la gravedad de los delitos que hayan cometido, según indicaron ayer fuentes socialistas.