"No había médico ni oxígeno para mi hija", declara el padre de la niña que cayó a la piscina

Ignacio G. P., el padre de la niña que el pasado sábado se cayó al agua en la piscina del Club de Campo, ha denunciado que en el momento del accidente "no había médico ni oxígeno para atender a mi hija". Según la versión de la familia, los servicios de urgencia de las instalaciones tardaron "muchos minutos" en aparecer, y si la pequeña está viva fue gracias a la rápida intervención de un médico y de una enfermera que se encontraban en la zona. "Los dos, en bañador, socorrieron a mi hija, y gracias a ello está con vida", cuenta el padre. La niña estuvo 24 horas en coma.

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Ignacio G. P., el padre de la niña que el pasado sábado se cayó al agua en la piscina del Club de Campo, ha denunciado que en el momento del accidente "no había médico ni oxígeno para atender a mi hija". Según la versión de la familia, los servicios de urgencia de las instalaciones tardaron "muchos minutos" en aparecer, y si la pequeña está viva fue gracias a la rápida intervención de un médico y de una enfermera que se encontraban en la zona. "Los dos, en bañador, socorrieron a mi hija, y gracias a ello está con vida", cuenta el padre. La niña estuvo 24 horas en coma.

La versión de la familia de la pequeña que se cayó al agua en la piscina del Club de Campo difiere en muchos aspectos de la facilitada por los responsables de las instalaciones municipales. "Mi hija estaba con mi mujer, una cuñada y su niña en el Club de Campo. Se encontraban en la zona de juegos. Yo no estaba con ellas, como se ha dicho, porque soy voluntario de la Cruz Roja y en ese momento me encontraba atendiendo a un herido en la carretera de Burgos", relata el padre de la niña. "Mi mujer estaba calentando el biberón para la más pequeña de nuestras hijas cuando mi cuñada se dio cuenta de que las crías no estaban por allí. Entonces fue hasta la piscina y vio flotando a mi hija. Se tiró al agua y pidió ayuda. Con la ayuda de la gente que estaba por allí, la sacaron del agua".La colaboración de las personas que se encontraban tomando el sol en la piscina fue crucial, según la versión de la familia: "Apareció un señor en bañador que era médico y una señora que se identificó como enfermera del Puerta de Hierro. Entre los dos intentaron reanimar a la niña".

Según el padre, en el momento en que la pequeña se cayó en el agua, sólo había dos mujeres bañándose y el socorrista estaba sentado en su posición de vigilancia. "El socorrista ha contado que vio a mi hija y a su prima, una niña de cinco años con síndrome de Down, llegar solas, pero no hizo nada. Al parecer, tampoco se percató de que se había caído al agua. Cuando escuchó los gritos de mi cuñada pidiendo socorro, lo único que hizo fue salir corriendo a pedir ayuda".

Ignacio G. P. ha explicado que los responsables de las instalaciones tardaron en reaccionar. "El médico del Club de Campo acudió cuando ya habían pasado varios minutos. Tampoco sé por qué la cría no fue trasladada a la pequeña clínica que hay cerca de la piscina para ser atendida allí y por qué el oxígeno no aparecía. La niña estuvo al menos 15 minutos en apnea [una falta de respiración] y por lo menos cuatro minutos bajo el agua, según me han explicado los médicos que la tratan. También tardaron muchos minutos en avisar al Samur, y cuando este servicio llegó, no se les facilitó el parte de las actuaciones que se habían llevado a cabo".

Un portavoz del Club de Campo explicó ayer que el sistema de urgencias funcionó. "Es lógico que el padre y toda la familia estén enfadados y disgustados, pero no hubo negligencia por nuestra parte. El socorrista está destrozado". Los responsables de las instalaciones no permitieron el acceso ayer a la piscina a los medios de comunicación. "La gente está nerviosa y si ven cámaras se creará más alarma. Estamos preparando una comparecencia del gerente para dar todo tipo de explicaciones", precisó el portavoz.

Ignacio del Río, concejal del Ayuntamiento de Madrid, acudió en la noche del sábado, acompañado del gerente del Club de Campo, al hospital La Paz para interesarse por la pequeña. "Del Río nos ha dicho que va a ordenar que se abra una investigación para aclarar todo lo sucedido y averiguar si hubo negligencia", explica la familia de la niña.

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La pequeña, según la información facilitada por sus padres, se encuentra en coma: "Las próximas horas van a ser claves para determinar si la niña tendrá secuelas cerebrales por el tiempo en que estuvo sin oxígeno".

Ignacio G. P pondrá hoy el asunto en manos de sus abogados. "He hablado con ellos y me han aconsejado que no haga declaraciones, pero si he contado todo esto es para que la gente sepa que no todo discurrió como dicen en el Club de Campo. Nosotros pensamos reconstruir lo sucedido. Vamos a llevar el caso a los tribunales. Aunque, de momento, lo único que me preocupa es la vida de mi hija". La niña salió del coma a última hora de la tarde, pero los médicos mantienen prudencia sobre las posibles secuelas.

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