Un millar de personas protesta en Alzira por el AVE y el trasvase Júcar-Vinalopó
Cerca de un millar de manifestantes procedentes de La Ribera, La Costera, La Canal de Navarrés y el Valle de Ayora, se concentraron ayer en la plaza Mayor de Alzira para mostrar su oposición a dos proyectos del Gobierno: el trazado del AVE que afecta a varios municipios de La Ribera, La Costera y L'Horta Sud, y el trasvase de agua del río Júcar al Vinalopó. Asistieron diputados, dirigentes, alcaldes y concejales de diversas formaciones políticas como el PSPV, EU, BNV, UV, Els Verds, así como el concejal de Agricultura de Sueca, que pertenece al PP. Carlos Feuerriegel, portavoz de la Coordinado...
Cerca de un millar de manifestantes procedentes de La Ribera, La Costera, La Canal de Navarrés y el Valle de Ayora, se concentraron ayer en la plaza Mayor de Alzira para mostrar su oposición a dos proyectos del Gobierno: el trazado del AVE que afecta a varios municipios de La Ribera, La Costera y L'Horta Sud, y el trasvase de agua del río Júcar al Vinalopó. Asistieron diputados, dirigentes, alcaldes y concejales de diversas formaciones políticas como el PSPV, EU, BNV, UV, Els Verds, así como el concejal de Agricultura de Sueca, que pertenece al PP. Carlos Feuerriegel, portavoz de la Coordinadora Riu Xúquer, a la que pertenecen numerosos colectivos ecologistas, agrarios y cívicos, manifestó que la conducción del Júcar al Vinalopó "es una insensatez porque técnica e hidrológicamente no se sostiene". Incidió además en que "destrozarán las mejores tierras del interior de Valencia".Por su parte, el concejal de Agricultura de Sueca, el popular José Luis Matoses, fue muy contundente al subrayar que las previsiones de caudales contempladas en el Plan Hidrológico Nacional "son falsas" ya que este río hace tiempo "que no tiene excedentes de agua".
Los convocantes se oponen al trazado del AVE porque a su juicio "aumentará el riesgo de inundaciones" y además "desaparecerán las mejores tierras de regadío de La Ribera".
El alcalde de Benimodo, el socialista Manolo Bertí, y la alcaldesa de Benifaió, Matilde Ferrà (BNV), presentes en la concentración, se quejaron de que ambas poblaciones sufrirían "un grave impacto acústico, además de ambiental", al discurrir el futuro trazado a unos 500 metros de ambos núcleos urbanos.