El violinista Ara Malikián toca en La Fídula a favor de la paz

El violinista armenio residente en Madrid Ara Malikián aprendió a tocar este dulce instrumento en los sótanos de Beirut cuando arreciaba la guerra de Líbano, acuciado por su padre, también armenio y virtuoso violinista. Sus notas disimulaban los estruendos de los morteros, y en aquellas catacumbas, con ocho años, encontró a su primer público, algunos niños como él, gentes atemorizadas para quienes la música era la puerta de evasión del miedo.Ahora, tras una sucesión de premios internacionales que le han encumbrado como uno de los mejores violinistas del mundo, y de actuar en el ciclo de Música...

El violinista armenio residente en Madrid Ara Malikián aprendió a tocar este dulce instrumento en los sótanos de Beirut cuando arreciaba la guerra de Líbano, acuciado por su padre, también armenio y virtuoso violinista. Sus notas disimulaban los estruendos de los morteros, y en aquellas catacumbas, con ocho años, encontró a su primer público, algunos niños como él, gentes atemorizadas para quienes la música era la puerta de evasión del miedo.Ahora, tras una sucesión de premios internacionales que le han encumbrado como uno de los mejores violinistas del mundo, y de actuar en el ciclo de Música Creativa del Cuartel del Conde Duque, recala desde ayer en La Fídula acompañado por el piano del imprescindible Horacio Icasto y el contrabajo de Víctor Merlo. Entre los tres ejecutarán las notas del concierto titulado Música para la paz, a prueba de bombas, con temas que él mismo tocaba en aquellos refugios de Beirut, piezas muy conocidas de la música clásica, temas del folclore armenio y libanés y canciones populares.

Música para la paz, a prueba de bombas. Hoy y mañana, en La Fídula, Huertas, 57. Metro Antón Martín. 23.00 y 1.00. Suplemento de 800 pesetas.