FÚTBOL Semifinales de la Copa del Rey

Van Gaal: "Espero que Rivaldo y Kluivert hablen en el campo"

No hubo castigo para nadie. Louis Van Gaal, técnico del Barça, evitó ayer cargar contra Rivaldo y Kluivert por su conato de rebelión cuando el lunes le reprocharon que se equivocó al sustituirles ante el Mallorca. "Mi deseo es que hablen más en el césped y menos fuera", dijo el técnico, que apareció serio, tenso y muy contenido tras la reunión de una hora que hubo ayer en el vestuario. Cercado por las derrotas ante el Chelsea y el Mallorca, que hipotecan la suerte del Barça en Europa y en la Liga, Van Gaal devolvió la pelota a los jugadores y les inyectó toda la presión. Fue la postura más háb...

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No hubo castigo para nadie. Louis Van Gaal, técnico del Barça, evitó ayer cargar contra Rivaldo y Kluivert por su conato de rebelión cuando el lunes le reprocharon que se equivocó al sustituirles ante el Mallorca. "Mi deseo es que hablen más en el césped y menos fuera", dijo el técnico, que apareció serio, tenso y muy contenido tras la reunión de una hora que hubo ayer en el vestuario. Cercado por las derrotas ante el Chelsea y el Mallorca, que hipotecan la suerte del Barça en Europa y en la Liga, Van Gaal devolvió la pelota a los jugadores y les inyectó toda la presión. Fue la postura más hábil: tuvo una coartada para no castigar a dos de sus mejores futbolistas -no hizo lo mismo en su día con otros- pero deslizó que tampoco olvida."No puedo olvidar nada de lo que ha sucedido en mi vida. Pero siempre hacéis interpretaciones negativas. Quizás esto es el inicio de nuevos éxitos", dijo el técnico en una desconcertante pirueta. Luego, ya en Madrid, confesó que ha sido incapaz de controlar al entorno desde que está en Barcelona, y recordó que no perdona. Y acusó veladamente a los dos delanteros de buscar excusas: "Cuando hay derrotas, hay tensión, las cosas no van bien. Y todos quieren justificarse. Es un círculo vicioso".

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El ambiente no es el más propicio para afrontar la cita del Calderón. El pulso entre el técnico y la plantilla es más que evidente. "Las personas son mayorcitas. Hablando se entienden. No ha habido terapia. Sólo una conversación", dijo Figo muy relajado y sonriente. Su rictus fue muy distinto al de Van Gaal. El portugués no hizo, como en otros tiempos, la menor llamada a la disciplina. Y fue críptico cuando contestó si habían perdido la confianza en Van Gaal: "Está aquí desde hace mucho tiempo para seguir trabajando".

El técnico se agarró a la agresividad para noquear al Atlético. No podrá contar hoy con Guardiola, que no se ha recuperado de su lesión en los gemelos. "No sé cuándo volverá. Dependerá de cómo evolucione. Hoy ha empezado a correr de forma muy suave",dijo Van Gaal en un tono glaciar respecto a su capitán, a quién despreció hace una semana al asegurar que la clave de la última racha del Barça se debía a Frank de Boer y Hesp. "¡No puedo hablar de eso!", dijo con sequedad el portero cuando se le preguntó acerca de Kluivert y Rivaldo.

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