OPINIÓN DEL LECTOR

¿Foro de las culturas o de la cultura?

Mi nombre es judío. Mi apellido es mozárabe. Mi religión es una herejía griega de la ortodoxia judía, que a su vez era una herejía monoteísta egipcia. Cuento los minutos, las horas y los meses como los babilonios. El papel en que escribo es un invento chino, igual que los fuegos artificiales de mis fiestas, y la pólvora de mis guerras. Escribo en letras latinas, que vinieron de los fenicios a través de los griegos y los etruscos. La lengua que hablo es latina, con un 15% de árabe. Mis genes íberos provienen del norte de África: mis antepasados también llegaron en pateras. Los números (rojos) d...

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Mi nombre es judío. Mi apellido es mozárabe. Mi religión es una herejía griega de la ortodoxia judía, que a su vez era una herejía monoteísta egipcia. Cuento los minutos, las horas y los meses como los babilonios. El papel en que escribo es un invento chino, igual que los fuegos artificiales de mis fiestas, y la pólvora de mis guerras. Escribo en letras latinas, que vinieron de los fenicios a través de los griegos y los etruscos. La lengua que hablo es latina, con un 15% de árabe. Mis genes íberos provienen del norte de África: mis antepasados también llegaron en pateras. Los números (rojos) de mi cuenta corriente están en cifras árabes, quizá copiadas de la India. Unto el pan con tomate, un sabroso invento americano, igual que el tabaco, el chocolate o las humildes patatas. La música que prefiero es la de los hijos de esclavos africanos llevados a América por negreros catalanes, andaluces u holandeses. Y mi apego a la vida la comparto con toda la humanidad por igual. ¿Cuál es, entonces, mi cultura?El Fòrum de les Cultures 2004 nos va a clasificar en culturas nacionales estancas, opuestas unas a otras, compitiendo como en los Juegos Olímpicos: cultura catalana, española, vasca, andaluza, francesa, china o maorí. El discurso sobre las culturas ha venido a sustituir al discurso sobre las razas: pero es igual de nefasto y repugnante. Por mi parte, me sumo a los fastos del 2004 con una aportación cultural inequívoca: una solemne butifarra.- Jesús Royo Arpón. Vilassar de Mar.

Beck

Parece que la crítica mundial está esperando el tropiezo de Beck, pero de momento no llega. Sin embargo, Luis Hidalgo, en su crítica del concierto en Barcelona, no ha podido aguantar más. Sugiere que la gente fue a verlo "porque mola, porque es más moderno que el celofán, y por tanto sus conciertos son de obligada asistencia". La gente en general no es ni tan superficial ni tan tonta. Personalmente, fui a verlo porque me gusta la música de Beck, y la verdad es que disfruté mucho. Tampoco creo que Beck destaque porque "la música de consumo" tenga un perfil tan plano y redundante. Eso no hace justicia ni a Beck ni a muchos músicos más. Si el mercado musical se encuentra como Hidalgo lo describe, fracasar debe ser casi imposible. ¡Me voy a comprar una guitarra!-Neil Kinsella. Lleida.

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