Dos muertos al estrellarse un helicóptero militar
Dos militares fallecieron ayer en el accidente de un helicóptero que se estrelló ayer, sobre las 19.30, en la carretera de la Punta del Verde, junto a la esclusa del puerto de Sevilla, muy cerca del puente del V Centenario. Martín Zazo León, sargento mecánico del Ejército del Aire, pereció en el momento del choque. Otro de los ocupantes del helicóptero, el teniente Juan José Tirante García, falleció nada más ingresar en el Hospital Militar Vigil de Quiñones, al que fue trasladado en una UVI móvil. El piloto del aparato, José Manuel Navas, ingresó en el Hospital Virgen del Rocío con traumatismo...
Dos militares fallecieron ayer en el accidente de un helicóptero que se estrelló ayer, sobre las 19.30, en la carretera de la Punta del Verde, junto a la esclusa del puerto de Sevilla, muy cerca del puente del V Centenario. Martín Zazo León, sargento mecánico del Ejército del Aire, pereció en el momento del choque. Otro de los ocupantes del helicóptero, el teniente Juan José Tirante García, falleció nada más ingresar en el Hospital Militar Vigil de Quiñones, al que fue trasladado en una UVI móvil. El piloto del aparato, José Manuel Navas, ingresó en el Hospital Virgen del Rocío con traumatismo craneal abierto y traumatismo inferior. Necesitó ventilación mecánica, según un portavoz del servicio de emergencias 061. El helicóptero, un Superpuma HV, procedía de Ceuta, donde recogió a un guardia civil enfermo que trasladó al Hospital Militar de Sevilla. Después de dejar al paciente en este centro, el aparato partió hacia la base militar de El Copero. Cuando se disponía a aterrizar, el helicóptero se estrelló contra la carretera de acceso a la base.
Según un portavoz militar se ignoran las causas del siniestro. Al parecer, el aparato "se desplomó" a unos 100 metros de las instalaciones aéreas a las que pertenecían los tres ocupantes del aparato, quienes habían realizado la misma maniobra de aproximación casi todos los días, aseguró la misma fuente. El accidente lo pudieron ver con toda claridad los soldados del recinto militar donde, en ese momento, se arriaba la bandera. El aparato quedó hecho un amasijo de hierros. El juez de guardia se personó en el lugar a las 21.30.
Oficiales del Ejército de Tierra ordenaron inmediatamente acordonar la zona, impidieron el acceso al lugar de los hechos a los medios informativos y retuvieron los equipos de los fotógrafos y cámaras de televisión. Según uno de los oficiales al mando, la legislación vigente declara zona militar el terreno del accidente.
Al amplio despliegue de soldados se unieron en el lugar del siniestro numerosas unidades de la Guardia Civil, la Policía Local de Sevilla y el servicio de seguridad del puerto. A la carretera de la Punta del Verde se trasladaron varios militares de paisano que mostraron su pesar tras conocer el alcance del suceso.