Cien partidos con Van Gaal

Van Gaal celebra su partido número 100 en Primera sin otro particular que el de presumir, recordando sus tiempos de entrenador del AZ Alkmaar y del Ajax, de que siempre cumple "muchos encuentros" en los equipos que prepara. Puesto que sabe que la estadística está de su parte, el técnico presenta las cifras como argumento para combatir la cháchara que generan su mal genio y su libreta. No alcanzó aún los números de Johan Cruyff, pero en sus dos primeras temporadas ganó dos Ligas. Víctima de la impopularidad y, al tiempo, con la sana y envidiable complicidad de sus compañeros por haberse ganado ...

Van Gaal celebra su partido número 100 en Primera sin otro particular que el de presumir, recordando sus tiempos de entrenador del AZ Alkmaar y del Ajax, de que siempre cumple "muchos encuentros" en los equipos que prepara. Puesto que sabe que la estadística está de su parte, el técnico presenta las cifras como argumento para combatir la cháchara que generan su mal genio y su libreta. No alcanzó aún los números de Johan Cruyff, pero en sus dos primeras temporadas ganó dos Ligas. Víctima de la impopularidad y, al tiempo, con la sana y envidiable complicidad de sus compañeros por haberse ganado la estima de su presidente, Van Gaal es uno de los técnicos que más tiempo llevan en un club de la categoría, junto con Mané y con excepción de Luis Fernández.El coste social, económico y sentimental de la transformación dirigida por Van Gaal en el Barça es difícil de asumir; tanto, que la hinchada le está dando la espalda al equipo, de perfil cambiante. Una vez que utilizó a la quinta de Lo Pelat para financiar a sus fichajes, Van Gaal ha desautorizado al capitán (Guardiola) y obligado a rendirse a la estrella (Rivaldo) en un contencioso de consecuencias imprevisibles, puesto que incide en la desidentificación de la afición con el equipo. El proceder de Van Gaal causa animadversión y despecho (todo el mundo se siente capaz de hacer campeón al Barça), pero cuantos le desafiaron se han estrellado, entre ellos Guus Hiddink, con el que hoy se reencontrará después que el ex seleccionador holandés fracasara en su intento de combatirle desde el Madrid tras el Mundial 98. Como diría Cruyff, Van Gaal no ha logrado aún que el Barça juegue con la alegría de Holanda, pero nadie se le ha acercado más ni ha discutido su jerarquía en el campeonato. Mientras Van Gaal lucha por la Liga y aspira a hacer campeona a Holanda, Hiddink intenta salvar el Betis y a Cruyff no le apetece entrenar, de la misma manera que a muchos otros el fútbol dejó de interesarles. Van Gaal gana, aunque sea por agotamiento. No hizo nada por acercarse al Barça, pero engordó su currículo en el Barça.