La compañía Ibérica de Danza vuelve con su visión ciudadana de lo tradicional
Tan sólo dos días el pasado mes de mayo en el teatro Albéniz les supieron a poco; por ello, los miembros de la compañía Ibérica de Danza han querido repetir experiencia y vuelven a Madrid con su espectáculo Bailando en el tiempo. En él recogen la tradición de los bailes folclóricos españoles y la pasan por el tamiz de su visión moderna y ciudadana. Como ocurrió en las dos representaciones del ciclo Madrid en danza, este grupo cuenta con la presencia en el escenario de ocho afamados músicos del circuito folk.
La compañía Ibérica de Danza se formó en 1993 y desde entonces ha recorrido los...
Tan sólo dos días el pasado mes de mayo en el teatro Albéniz les supieron a poco; por ello, los miembros de la compañía Ibérica de Danza han querido repetir experiencia y vuelven a Madrid con su espectáculo Bailando en el tiempo. En él recogen la tradición de los bailes folclóricos españoles y la pasan por el tamiz de su visión moderna y ciudadana. Como ocurrió en las dos representaciones del ciclo Madrid en danza, este grupo cuenta con la presencia en el escenario de ocho afamados músicos del circuito folk.
La compañía Ibérica de Danza se formó en 1993 y desde entonces ha recorrido los pueblos del norte y centro de España para conocer las danzas folclóricas que bailan los lugareños. "Con este montaje damos una imagen de las danzas tradicionales recreadas desde el punto de vista ciudadano", describió ayer Manuel Segovia, director, junto a Violeta Ruiz, de la compañía. "En este montaje hemos contado con la ayuda de los músicos, que llevan mucho más tiempo que nosotros haciendo esto mismo, pero con las melodías", dijo la directora. Entre los músicos que han aportado sus creaciones para este espectáculo están Eliseo Parra, Javier Paxariño, Eduardo Laguillo, Dimitri Psonis y tres miembros del grupo La Musgaña: Carlos Beceiro, Jaime Muñoz y Enrique Almendros. Todos han publicado varios discos de música folk, en los que presentan tanto la recopilación de temas tradicionales como creaciones propias basadas en los sonidos de la tradición. "Yo buscaba lo que estaban haciendo ellos, porque la música sola, sin la danza, está francamente coja", dijo Parra. "Ha sido emocionante ver por fin nuestra música bailada, porque, con nuestras recreaciones, la gente de los pueblos no reconocía exactamente los pasos tradicionales y no la podía bailar", apuntó Almendros, por su parte.
En este montaje con 17 números, que combinan desde jotas hasta flamenco, danza histórica y barroca, intervienen 10 bailarines. "Una parte de la compañía está de gira, acaba de venir de Holanda, y el domingo salimos para Nepal, invitados por los reyes", aseguró Violeta Ruiz, para después sorprenderse: "Aún no hemos ido a Toledo o Segovia".
Bailando en el tiempo. Teatro de Madrid. Avenida de la Ilustración, s/n. Metro Barrio del Pilar. Desde mañana hasta el 30 de enero. De 800 a 3.000 pesetas.